El coronavirus no solo se ha convertido en una emergencia sanitaria, sino que también en un problema logístico y Estados Unidos es prueba de ello. El país se elevó sus controles fronterizos desatando el caos en los aeropuertos.
Los estrictos controles de sanidad a los que vienen siendo sometidos los pasajeros procedentes de Europa, con la intención de descartar síntomas del COVID-19, ha desatado caos en los aeropuertos , ocasionando largas colas de espera.
Como se recuerda, la medida fue anunciada por el presidente Donald Trump a inicios de semana. Estas restricciones entraron en vigor desde el sábado y se aplica a todos los pasajeros procedentes del viejo continente.
Según información de los corresponsales, aeropuertos como el O’Hare de Chicago o el DFW de Dallas estuvieron abarrotados con inmensas filas de pasajeros que esperaron hasta cinco horas para poder ser sometidos a las revisiones que buscan combatir el virus de Wuham.
Otra toma de las colas en el Aeropuerto de Chicago. Foto: Internet
La espera fue tan larga, que el personal de la terminal aérea terminó repartiendo agua y comida a la multitud.
En total son trece los aeropuertos elegidos como puntos de entrada de pasajeros de lugares afectados gravemente por el coronavirus. Esta situación de caos impidieron que numerosos pasajeros pudieran llegar a tiempo a sus destinos.
Los viajeros también han comentado que se han visto obligados a permanecer hacinados en espacios cerrados durante horas, lo que contradice las recomendatorios de evitar aglomeraciones en aras de prevenir el contagio y propagación del nuevo coronavirus.
Algunos pasajeros hacen cola con mascarilla en la boca. Foto: Internet
Ruth Procopi, quien ha vivido en el área de Chicago durante 20 años, regresó el sábado de Reino Unido donde estuvo visitando a su familia. “Llegué (al aeropuerto O’Hare) desde Heathrow a las 3.30 pm ayer. Era un caos. Nadie nos explicaba nada”, le dijo a la BBC.
Por su parte, el gobernador de Illinois B Pritzker dijo que las largas filas en O’Hare eran “inaceptables”.
Otros pasajeros, acusaron al mandatario estadounidense de “crear el escenario perfecto para transmitir el COVID-19”.
Aeropuerto Lauderdale. Foto: Internet
Esta hipótesis fue respaldada por expertos en salud pública que también han notado que las largas esperas en terminales abarrotadas pueden potencialmente conducir a que más gente se contagie con el virus.
El gobierno de Donald Trump prohibió la entrada de personas procedentes de los 26 países miembros de la zona Schengen europea.
Para este lunes se espera que entre en vigencia la prohibición a ciudadanos que arriben desde el Reino Unido e Irlanda.