En Ciudad de México, una mujer de 22 años, identificada como Jaqueline Armenta, fue condenada a prisión preventiva, tras estar como prófuga de la justicia, debido a que fue acusada de homicidio calificado tras intentar de asesinar a su bebé.
Las autoridades presumen que Armenta es la responsable de arrojar a su hija entre las paredes de dos viviendas en la colonia Barrio de Santiago, Iztacalco, el pasado 3 de marzo.
Al ser rescatada, la bebé fue trasladada al Hospital Pediátrico de Iztacalco, mientras que la madre de la víctima fue llevada hasta el Hospital Doctor Rodolfo Antonio de Mucha Macías, debido a que presentaba lesiones.
Sin embargo, al día siguiente de ser internada, Armenta abandonó el nosocomio y evitó a las autoridades que intentaron interrogarla por la niña.
Asimismo, la defensa de la mujer pidió la duplicidad del término legal por lo que el juez la citó para el próximo miércoles.
La fémina fue trasladada al penal de Santa Martha Acatitla de Iztapalapa, ubicado en la Ciudad de México, para que cumpla la prisión preventiva ordenada por la fiscalía.
Cabe precisar que uno de los vecinos llamó a los servicios de emergencia al escuchar los llantos de la menor, atascada entre dos paredes.
Los rescatistas descubrieron que la criatura estaba atrapada a tres metros de profundidad. Ellos también vieron sangre y manchas en las paredes. Al recoger a la víctima, notaron que tenía su cordón umbilical.