A las 12:10 horas de este jueves 13 de febrero estalló una carta bomba en las oficinas del banco ING en Ámsterdam. El dispositivo había sido enviado a uno de los trabajadores, convirtiéndose así en el cuarto artefacto explosivo remitido en los últimos dos días.
A través de su cuenta de Twitter, la Policía de Ámsterdam confirmó el hecho ocurrido en la calle Bijlmerdreef. La explosión se produjo cuando el empleado abrió el paquete, según indicaron fuentes a la cadena estatal NOS.
Expertos en explosivos llegaron a la sede de ING para analizar el material. Asimismo, las autoridades indicaron también que una persona fue atendida por inhalación de humo. Una ambulancia se acercó a la zona como medida de precaución.
Existe la posibilidad de que esta explosión esté relacionada con las otras que fueron dirigidas a empresas como ABN AMPRO Bank y Ricoh, y que el objetivo sea la extorsión. Las cartas reclaman el pago de bitcoins y amenazaba con continuar el envío de cartas bomba si es que no se hace el pago, según indicó la Policía.
Por la mañana de este jueves fue hallada otra carta bomba. Sucedió en la empresa estadounidense de software, Unisys, ubicada en Leusden. Debido a la rápida acción de los expertos en explosivos del Ministerio de Defensa, el dispositivo fue desactivado.
Como ocurrió en este caso, que el artefacto fue desactivado, también sucedió con los del ABN AMPRO Bank y Ricoh. Estos últimos recibieron los artefactos explosivos el miércoles 12 de febrero.