Desde el Banco Mundial alertaron que la economía peruana cerró el 2023 con una caída de 0,4% —su peor resultado en más de dos décadas, sin contar la pandemia— y, para este año, aguardan un rebote auspicioso, a raíz de las mejores condiciones climáticas.
Así, el bloque multinacional prevé un crecimiento de 2,5% gracias a los buenos desempeños de sectores como agricultura, pesca y manufactura. Para el 2025 estiman una tasa de 2,3%.
De acuerdo con su reciente informe, esperan que la producción de las principales minas de cobre en el Perú aumenten y catapulten a actividad minera; sumado a que la inflación entró a una trayectoria descendente y con las bajas de la tasa de interés referencial, se respaldaría el crecimiento del PBI pronosticado.
No obstante, la economía sigue sujeta a la incertidumbre política, la cual "sigue afectando a los consumidores, confianza empresarial y obstaculiza la inversión en proyectos", acotaron desde el Banco Mundial.
Nuevamente, el Perú volvería a superar el promedio regional, ya que para 2024 estiman que el PBI de América Latina y el Caribe sea de 2,3%. "A medida que la inflación disminuya, se prevé que los bancos centrales bajarán las tasas de interés, lo que reducirá los obstáculos al aumento de la inversión", acotaron.