En el 2023, la tarifa eléctrica para usuarios domiciliarios registró una reducción acumulada de 8,74%, lo cual benefició a 8,7 millones de usuarios del servicio eléctrico en todo el país; así lo dio a conocer Osinergmin, organismo que tiene la función de calcular la tarifa eléctrica de manera técnica, autónoma e imparcial.
En esa misma línea, las tarifas eléctricas para los usuarios comerciales e industriales del mercado regulado de electricidad se beneficiaron con una disminución acumulada de 4,68%.
Osinergmin precisó que la variación responde a factores como la reducción en 2,52% en el Valor Agregado de Distribución (VAD) para las empresas de distribución eléctrica, así como a la estabilización de indicadores macroeconómicos como el Tipo de Cambio y el Índice del Precio al Por Mayor, que registraron reducciones promedio de 6,48% y 0,33% respectivamente, en relación al año anterior.
Tuvo impacto en la tarifa, también, el incremento de la demanda de energía en 4,46% respecto del año anterior, así como al incremento del nivel de inversiones relacionado con el fortalecimiento de la infraestructura de los sistemas de generación y transmisión eléctrica.
Al respecto, se destacó el ingreso del proyecto de generación eólica Punta Lomitas y los proyectos de transmisión Chilca-La Planicie-Zapallal, Tintaya-Azángaro, Enlace Mantaro-Nueva Yanango-Carapongo, y las Subestaciones de Potencia en el departamento de Ica.
Por otro lado, en setiembre de 2023 se marcó un hito en la regulación tarifaria y en la modernización del sector eléctrico en el Perú con la aprobación de la opción tarifaria BT5I, también llamada Tarifa Inteligente.
Esta tarifa que se viene aplicando a 105.000 usuarios residenciales comprendidos en el Plan Piloto de Sistemas de Medición Inteligente (SMI) permite reducir el recibo por consumo de electricidad mediante el uso eficiente de la energía eléctrica en tres periodos tarifarios que ofrece la mencionada opción tarifaria.
Osinergmin viene impulsando, en conjunto con el Poder Ejecutivo, proyectos de ley que permitirán el ingreso de energías renovables no convencionales (solar y eólica) con una capacidad de potencia de 2.000 MW de generación solar en el sur y en el norte del país, con el objetivo de que se reduzcan los costos de producción de la energía eléctrica en el mercado mayorista, en beneficio de todos usuarios del sector eléctrico.