Los ingresos tributarios del Gobierno central –descontando la devolución de impuestos– alcanzaron los S/12.328 millones en noviembre. Si bien esta cifra supera en S/113 millones a lo registrado en similar mes del 2022, aún representa una caída de 2,6% en términos reales, según información de la Sunat.
De esta manera, ya van nueve meses consecutivos en que la recaudación tributaria registra tasas negativas.
Los bajos recursos captados en noviembre se debe al menor nivel del Producto Bruto Interno (PBI) de octubre, ya que la mayor parte de las operaciones económicas del mes generan obligaciones tributarias que se declaran y pagan durante noviembre, explicó la entidad.
No obstante, la caída fue moderada en el penúltimo mes del año gracias a los pagos extraordinarios obtenidos por la Sunat y porque las operaciones empresariales lograron aumentar los ingresos de noviembre en S/324 millones.
Así, entre enero y noviembre, la recaudación tributaria asciende a S/135.693 millones, lo que significa una contracción de 12,7% y representa S/10.098 millones menos que lo captado en similar periodo del 2022.
Roberto Polo, profesor de Derecho Tributario de la Universidad del Pacífico, explica que estos menores ingresos es el reflejo de cómo viene la economía nacional y que no se evidencia aún una clara recuperación del PBI.
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“La recaudación es un reflejo de la situación económica que atraviesa el país y la recesión en que estamos inmersos. Los ingresos han caído y se debe a que naturalmente la demanda también ha disminuido en nuestro país”, sostiene el docente.
Y en efecto, muestra del deterioro de la economía son los ingresos por concepto de Impuesto General a las Ventas (IGV), que a noviembre llegaron a los S/76.588 millones, cayendo en 11,5% frente al 2022. Este indicador es una señal de cómo va el consumo, ya que es un tributo que pagan los peruanos al adquirir un bien o servicio.
En tanto, el Impuesto a la Renta (IR) viene acumulando S/58.362 millones en lo que va del año, representando un retroceso de 16,3%, un claro reflejo de que el dinamismo empresarial se enfrió, ya que este pago de tributo se genera en función a los ingresos por ventas mensuales que tienen los contribuyentes tipo empresa.
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Si bien en noviembre la caída de la recaudación ha sido la más moderada que los meses previos, esto podría explicarse por el pago de la CTS que se dio en dicho mes, que hizo que la gente pueda disponer de estos recursos y gaste. En tal sentido, estima que lo mismo podría observarse en diciembre con el pago de la gratificación, lo cual podría reactivar el consumo y las ventas de las empresas.
“En noviembre se paga la CTS y mucha gente espera este pago para liberarla y efectuar algún tipo de compra y seguramente en diciembre podríamos ver algún tipo de efecto con la gratificación y la campaña navideña podrían ayudar a que el consumo se active un poco más pero sería estacional. El IGV y el pago cuenta miden de forma muy precisa cómo está la economía”, resalta Polo a La República.
Entre enero y noviembre, se devolvieron S/22.164 millones de impuestos, lo cual representa un aumento de 1,8% frente a similar periodo del 2022.
Hasta octubre, la actividad económica con mayor devolución de tributos fue el sector de la minería e hidrocarburos con S/6.069 millones, lo cual representa un aumento de 0,6% frente a similar periodo del año pasado, según información oficial de la Sunat.
Los sectores beneficiados son los rubros de comercio (S/5.123 millones), manufactura (S/3.728 millones), otros servicios (S/2.918 millones) y agropecuario (S/1.036 millones).