Tras la ampliación del aislamiento social, la economía peruana podría caer este año en -4,7%, una contracción superior a la de Bolivia (-3,4%) e incluso Chile (-3%), según el último informe “La economía en tiempos de COVID-19”, publicado ayer por el Banco Mundial.
No obstante, para Martín Ramas, el economista jefe del organismo multilateral para América Latina y el Caribe, “las cifras hay que tomarlas con ciertas previsiones” por el nuevo margen de incertidumbre que existe en el mundo debido al impacto en economías fuertes como EEUU.
“Perú entró (a la crisis) en una posición sólida, destinando un paquete fiscal equivalente al 7% del PBI, el más alto de América Latina, que permite pensar en que controlará mejor la crisis”, sostuvo.
Sobre el desempeño de la región, el Banco Mundial adelantó que sufrirá un desplome de -4,6%, siendo Ecuador, México y Argentina los que más sufrirían. El organismo señaló que seguirá monitoreando el comportamiento de los países de América Latina a través de los niveles de dióxido de nitrógeno, que refleja el comportamiento de las industrias
En los próximos días lanzarían una plataforma de análisis.
Un desafío al que deberán enfrentarse las economías latinoamericanas en las próximas semanas estará ligado a la conservación del empleo, dijo Ramas.
“En condiciones normales, se protege a la gente, pero hoy todo el mundo está golpeado, empresas que se demoran en construirse, así, una política de protección de fuentes de empleo es fundamental”, acotó.
La asistencia social dependerá del espacio fiscal de los países. En esa línea, el economista dijo que se tendrá que priorizar el apoyo a las empresas que más empleo generen “y que no solo sean los lobbies”.
“Se tendrá que decidir entre recapitalizar bancos, retomar deudas impagas, tomar parte de empresas. Pero lo que queremos es que se puedan tomar decisiones sin miedo a las consecuencias”, señaló y en ese sentido indicó que el mayor rol que adquirirá el Estado debe hacerse con “el profesionalismo del sector privado y no con influencias políticas”, además de transparencia, para tener la confianza de la población.
“Cuando no hay espacio fiscal hay que decidir a quién protejo y esa decisión se vuelve extraordinariamente importante”, advirtió el representante del Banco Mundial.
Por otro lado, el organismo multilateral señaló que evalúa la suspensión del pago de las deudas externas de los países más vulnerables ante los impactos del COVID-19.
Asimismo, aseguró que en los próximos 15 días dispondrá de hasta S/ 16 mil millones para apoyar la lucha sanitaria y económica contra la crisis por la pandemia.