La ropa blanca es una de las más prominentes en el armario de cualquier persona. Desde polos y pantalones hasta ropa interior, el blanco es un color muy combinable y versátil en el universo de las prendas de vestir. Sin embargo, estas traen una única desventaja a comparación de otras ropas: tienen el ‘defecto’ de ser más susceptible a perder su tonalidad, a la suciedad y a las manchas. Por ello, saber cómo blanquear la ropa blanca es un conocimiento indispensable para el hogar.
Afortunadamente, existen varias alternativas caseras para blanquear la ropa blanca sin necesidad de usar lejía. Se trata de varios objetos que son fácilmente accesibles y baratos, por lo que no deberías tener más este problema con todas las posibilidades que hay. No obstante, es importante considerar primero cómo evitar que las prendas blancas se vean perjudicadas.
Existen diversos motivos por los cuales una prenda blanca se amarillenta o pierde su color original. En primer lugar, como con cualquier tipo de ropa, es importante revisar la etiqueta para saber cómo se lava en cada caso en específico. Aquello que sí es una regla implícita es que idealmente se debe lavar la ropa blanca separada de la de color.
Asimismo, el utilizar productos no aptos para el lavado también puede perjudicar el estado de las ropas. Siempre se recomienda emplear detergente o un jabón natural sin químicos para evitar que aparezcan manchas que no se pueden quitar, o para que no se deteriore la calidad del tejido. Finalmente, también es mejor lavar en lo posible con agua fría.
La ropa blanca es buena para el calor en caso no corra aire y sea ajustada. Foto: GLR
En general, otros factores que pueden dañar la ropa blanca son los siguientes:
Las alternativas para blanquear la ropa blanca que se listan a continuación son recomendaciones en general, pero es importante tomar en cuenta que algunas se acomodan mejor que otras dependiendo del material de cada una.
El limón es una de las mejores opciones para blanquear la ropa debido a que es muy versátil y funciona en la gran mayoría de texturas. Debes mezclar el zumo de limón con 5 litros de agua caliente en un recipiente, y remoja las prendas ahí por dos horas. Una vez finalizado el tiempo, procede a secarlas y a lavarlas de nuevo con normalidad.
El limón es una de las alternativas naturales para blanquear la ropa. Foto: Cocina Vital
El bicarbonato de sodio se puede mezclar con el vinagre para remover manchas. La idea es combinarlos en partes iguales, y aplicar la solución sobre la mancha a remover por una hora. Esto funciona particularmente bien en las prendas de algodón.
El carbonato de sodio puede conformar junto al agua oxigenada una mezcla más fuerte (requiere usar guantes) e igualmente efectiva. Se debe combinar dos cucharadas de agua oxigenada con una de carbonato de sodio, calentar la solución en el microondas por 15 segundos, y luego aplicarla sobre las manchas a remover. Finalmente, hay que dejar reposar por 15 minutos y lavar la prenda con normalidad.
La leche se puede combinar y utilizar de distintas maneras dependiendo de la textura de las prendas. Cuando se trata de leche cruda, basta con remojar las ropas delicadas durante dos horas antes de enjuagarlas y lavarlas con normalidad.
Para la ropa de seda, conviene mezclar dos cucharadas de agua oxigenada con dos de leche por cada litro de agua fría, remojar por unos minutos, aclarar con agua fría y secar bajo la sombra.
En el caso de la ropa de lana, se puede optar por remojar la prenda en un recipiente de agua fría con agua oxigenada (una cucharada por cada tres litros de agua) por 24 horas, aclarar y lavar. La otra posibilidad es sumergirla en leche sin pasteurizar por dos horas, y posteriormente aclarar y lavar también.
La mayoría de métodos para blanquear la ropa requieren igualmente un posterior lavado habitual. Foto: Cocina Vital
El percarbonato de sodio es un blanqueador natural y barato para la ropa, y sirve para varias cosas en la casa. En este caso, debe mezclar cuatro cucharadas de este con detergente e introducirlo en la lavadora (cantidad calculada para cinco kilos de ropa).
El vinagre blanco también es un elemento muy versátil para soluciones a problemas caseros, y para la ropa funge como un suavizante natural y blanqueador. Para este último fin, hay que mezclar ¼ de taza de vinagre blanco con jabón, y usar la solución para lavar la prenda como es habitual.