En sus 42 años de existencia, la cotizada marca de ropa Zara ha logrado posicionarse en varias partes del mundo, incluyendo Perú, Portugal, Japón, Arabia Saudí y Grecia. El motivo de su éxito se esconde detras de su fundador, Amancio Ortega, quién impulsado por el amor a su familia y sus carecias económicas decidió arriesgarlo todo y emprender un negocio.
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Es así como en 1963 puso en marcha Confecciones GOA (sus iniciales en sentido inverso) con su hermano Antonio. Esta empresa sería el embrión de Inditex, que pronto se convertiría en uno de los imperios textiles más grandes de España y del mundo.
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Hijo de un trabajador ferroviario y de una ama de casa, Amancio Ortega Gaona nació en 1936 en la localidad española de León. Según contó en varias entrevistas, su infancia fue bastante dura, debido a las carencias económicas por las que atravesaba su familia, a tal punto que tuvo que dejar la escuela a los 12 años para poder trabajar.
Su carrera en el mundo textil comenzó de forma muy prematura, pues su primer empleo lo consiguió como ayudante en una tienda de camisas a los 14 años. Gracias a que destacó pudo conseguir un puesto mejor en La Maja, una tienda de confección de más categoría.
Sus inovadoras propuestas hicieron que de poco en poco se ganara la confianza de los dueños de la empresa, por lo que cuando solicitó hacerse cargo de la confección de prendas, no duraron en decirle que sí.
Los resultados fueron muy positivos y aunque le gustaba su trabajo, Amancio no estaba dispuesto a regalar el valor añadido de sus iniciativas. Es así que su trabajo como dependiente de la tienda para dedicarse a la fabricación del producto.
Foto: Forbes
Los diez años previos de experiencia le sirvieron para hacer contactos con fabricantes de tejidos catalanes, que le dieron acceso a precios de mayorista. Además y lo más importante: había acumulado una interesante cartera de clientes propios.
Amancio Ortega en 1963 crea GOA, una empresa textil dedicada a la fabricación de vestidos y batas para mujer. Tras 12 años de éxito, decidió dar el siguiente paso y fundar su propia marca de ropa que logre vestir a sus clientes con prendas económicas y de buen diseño. Es así como en 1975, nace Zara.
La primera tienda se localizó en una calle céntrica de La Coruña. Desde ahí, con una exposición pública más evidente, y todo un aparato empresarial cosechado durante años por Amancio, el imperio empezó a crecer.
Una de las estrategias más sólidas de esta empresa fue implementar la moda rápida a su filosofía, ya que mientras sus competidores sacaban una nueva colección cada 3 meses, Zara lo hacía cada dos semanas. De esta manera, se aseguraba que sus clientes siempre encuentren prendas novedosas y de tendencia en sus tiendas.
Amancio Ortega es uno de los hombres más ricos del mundo. Foto: AFP
El crecimiento del negocio fue tan acelerado que para 1984 la firma inauguró su primer centro logístico, de 10.000 metros cuadrados en Arteixo, A Coruña, donde todavía tiene su sede central la firma.
Un año después se conformó el holding Inditex, que agrupa a todas las actividades de la empresa. Hoy, el grupo engloba ocho marcas que atienden a los diferentes targets: Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho, Zara Home y Uterqüe.
Zara ofrece vestimenta y calzado para mujeres, hombres y niños. Además, presenta colecciones por temporada como en el caso de Halloween, fecha por las cuales la tienda pone en stock accesorios conceptuales.
Las tiendas por departamento de Zara también se encuentra en territorio peruano. Actualmente, una de las sedes más grandes a nivel latinoamericano se ubica en Santiago de Surco, precisamente en el centro comercial Jockey Plaza con 3.000 metros cuadrados.