Halloween está a la vuelta de la esquina y Netflix tiene las películas perfectas para una maratón de terror. No obstante, si lo que quieres es agregarle misterio a tu noche de miedo, hemos pensado en la recomendación perfecta para ti: “El hoyo”, la cinta española que causó gran revuelo en 2019 por su inquietante trama, no apta para todo público.
De hecho, el streaming es consciente de las fuertes escenas que incluye el filme, pues está calificado como una producción 18+ en su plataforma. Aun así, ello no ha evitado que lo hayan nominado a importantes premios, entre ellos tres Goyas.
¿Qué pasó al final de El hoyo?
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“En una cárcel de varios pisos, la comida baja en una plataforma. Los reclusos de arriba comen en abundancia, pero los de abajo, casi nada. Una rebelión es inminente”, indica la sinopsis oficial de Netflix.
“El hoyo” nos aproxima a Goreng, un sujeto que ha despertado en una habitación junto a un señor mayor en una especie de cárcel. Pero la prisión no es como ninguna otra que se haya imaginado, pues está estructurada con celdas en disposición vertical y todas están conectadas por un hoyo en el centro de cada nivel.
Eso no es todo, sino que la forma en la que son alimentados los rehenes es de lo más perturbadora: una especie de tarima desciende cada día a la misma hora, con comida de todo tipo. Sin embargo, el banquete solo puede ser disfrutado de primera mano por los que habitan en el piso más alto.
El resto debe contentarse con ingerir las sobras que van dejando aquellos que están por encima de ellos. De esa manera, Goreng tendrá que lograr escapar del lugar, a la vez que ayuda a que la Administración se dé cuenta de que puede haber un cambio entre los presos. Todo esto mientras busca a la hija perdida de una de las reclusas.
“El hoyo” es, en esencia y forma, un retrato de la sociedad actual, en la que no todos se benefician de la misma manera. Así lo reveló el director de la película, Galder Gaztelu-Urrutia, en declaraciones recogidas por el diario El País.
“No es una crítica contra los de arriba o contra los de abajo. Es una exposición de una realidad, nos hacemos preguntas nosotros mismos como autores y queremos compartirlas con el espectador para contribuir a una especie de reflexión sobre el reparto de la riqueza”, expresó el cineasta.