La temporada de terror está a la vuelta de la esquina, lo que significa que es el momento perfecto para que prometedoras producciones del género inicien con su arribo a las diferentes plataformas de streaming. Por suerte, los diferentes servicios ofrecen la posibilidad de reproducir proyectos de diversos países.
Uno de los últimos thrillers añadidos a Netflix es La isla negra, un atrapante film alemán de suspenso que —aunque a primera vista pueda parecer otra relación espeluznante e inapropiada que sale mal— acaba por ser mucho más que eso. Dirigida por Miguel Alexandre y protagonizada por Hanns Zischler (Múnich, de Stephen Spielberg), Alice Dwyer y Mercedes Müller, la cinta ya se encuentra entre los títulos más populares del catálogo. Pero ¿de qué trata?
El largometraje comienza con el violento ataque a la abuela de Jonas Hansen por parte de un perro salvaje que la mata cerca de la costa. Cuatro meses después, los padres del joven mueren en un aparatoso accidente automovilístico en la carretera provocado por una misteriosa mujer. Tras los impactantes sucesos, el joven se ve forzado a quedarse con su abuelo en la isla, al menos hasta que termine el curso y se convierta en adulto.
Un año después, el protagonista entabla una cercana amistad con Nina Cohrs, que pronto evoluciona a algo más. Con el pasar de los días, él y sus compañeros se enteran del accidente del Sr. Meinke, su profesor alemán, en Mallorca. En ese momento, Helena Jung, una profesora sustituta, llega en su reemplazo. No obstante, su presencia despierta sentimientos en el muchacho y ambos se enfrascan en una prohibida cercanía.
Sin embargo, Nina empieza a sospechar sobre la extraña relación entre el estudiante y su maestra. Además, poco tiempo después se topa con cuestionables señales sobre la identidad de la docente, quien no es quien dice ser y oculta oscuras intenciones.