Once años después de su primera aparición en el MCU, Black Widow consigue su primera película en solitario, aunque pronto descubrimos que tiene a su familia para llevar a cabo la misión más personal de su vida. Se trata de una deuda saldada por parte de Marvel con la que todos salimos ganando, pero que ciertamente pudo dar más.
Se siente como ese regalo a los fans que se suponía que sería, así como el reconocimiento que Scarlett Johansson y su personaje merecían. Desde un inicio, la espía rusa logró sobresalir en un grupo todopoderoso pese a la carencia de habilidades sobrehumanas. En contrapeso, lo compensaba con astucia, letalidad y una fragilidad humana que dotaba al peligro de verosimilitud.
Marvel Studios tuvo que mirar atrás -donde el trágico pasado de Viuda Negra se dejaba entrever entre líneas- para darnos una historia que cierra una etapa para la protagonista, pero no se limita a solo eso. En realidad también aporta al MCU con más personajes y teje las bases de lo que serán nuevas historias (Yelena Belova y la escena poscrédito).
En concreto, vemos cómo el pasado de la espía alcanza su presente para que se reivindique antes de su máximo sacrificio en Avengers: endgame. Una especie de The Winter Soldier que adolece del mismo esquemático argumental, pero con incluso menos espectacularidad, sentido de la intriga o ambición. Sin problemas, lo más interesante y arriesgado del filme radica en sus créditos iniciales, aunque eso sea un terreno que difícilmente se atrevan a explorar.
Por supuesto, luego de 20 entregas entre el debut de Natasha y su película propia en el MCU, la franquicia ya había perfeccionado su fórmula ganadora y la cinta estaba destinada a seguir las pautas del manual bajo una dirección anónima. Y si bien esperar que rompa el molde sería iluso a estas instancias del partido, no hay razón para resignarse a la falta de sorpresas o elementos atractivos.
Florence Pug y Scarlett Johansson seran las protagonistas de la nueva película del UCM. Foto: Marvel Studios
Puede que Yelena Belova y el pasado esclarecido de Viuda Negra sean lo más reconfortante una vez acabado el visionado. En cambio, la comedia que proporcionan los pasajes familiares es un arma de doble filo que no conoce el momento adecuado para desenfundar, mientras que los grises de la protagonista apenas relucen para rescatarla de su bidimensional.
En suma, no sobresale como película de espías, ni acción o siquiera de Marvel Studios; sin embargo, aprueba como una pieza de entretenimiento propia de la casa. La espera de los fans para que la cinta vea la luz fue larga y podemos decir que valió la pena solo para los incondicionales. Para el resto de mortales, es un capítulo más del serial cinematográfico más grande de todos los tiempos.
Natasha Romanoff, también conocida como Black Widow, confronta las partes más oscuras de su historia cuando aparece una conspiración peligrosa con vínculos de su pasado.
Perseguida por una fuerza que no va a detenerse por nada hasta acabar con ella, deberá lidiar con su antigua vida como espía y sus relaciones rotas de antes de que se convirtiera en una Vengadora. Para esto, contará con la ayuda de viejos aliados: Yelena Belova, su ‘hermana’; y Alexei Shostakov, Guardián rojo.
El filme nos presentó a Yelena Belova como la hermana menor de la protagonista y ahora se erige como su sucesora en el Universo Cinematográfico de Marvel. Lo que pocos esperaban es que su futuro tomaría un rumbo menos heroico tras la aparición de la Condesa Valentina en la escena poscrédito.
Cuando Belova visita la tumba de su hermana para mostrarle sus respetos, la Condesa hizo acto de presencia para proponerle una misión: acabar con Hawkeye, a quien culpa de la muerte de Natasha. Por el momento no sabemos qué decisión tomará la espía al respecto, pero nos quedó claro que las dos mujeres ya habían trabajado juntas.
La Condesa ya había aparecido en Falcon and the Winter Soldier para reclutar a John Walker (US Agent) como uno de sus agentes. Por esto, más de un fanático cree que Valentina estaría formando un equipo de seres excepcionales similares a los Vengadores pero con otros intereses de por medio.
En el mejor de los casos se podría tratar de Dark Avengers, un equipo de superhéroes liderado por Norman Osborn en los cómics. En caso de que sean llevados a la pantalla grande, Marvel Studios podría tomarse varias licencias creativas considerando que ninguno de los integrantes originales fueron introducidos al MCU hasta la fecha.
Florence Pugh interpreta a Yelena Belova en Black Widow. Foto: Marvel Studios
Pese a que este proyecto fue pensado para una sola entrega, la directora de la cinta, Cate Shortland, no descartó la posibilidad de crear más secuelas relacionadas, incluso sin la participación de Scarlett Johansson.
“Creo que siguiendo a otro personaje, sí. Creo que Scarlett está realmente feliz de dejar la fiesta, ¿sabes?, y que no fue la última en irse. Ella decidió que quería irse. Y no creo que ella quiera regresar en este momento”, aseguró la cineasta en una reciente entrevista con Radio Times.