Luego de cuatro meses con una superluna, diciembre traerá una luna llena de apariencia habitual. Aunque menos llamativa en tamaño, no deja de ser un evento muy esperado por los amantes de la observación astronómica. Cuando el lado visible del satélite es completamente iluminado por el Sol marca el final del ciclo lunar y, para esta ocasión, también representa el último plenilunio de un año que se va.
Cada ciclo lunar consta de cuatro fases principales. Según la NASA, la secuencia se repite cada 29,5 días, el cual es el tiempo que tarda la Luna en completar una órbita alrededor de la Tierra. A continuación, todos los detalles acerca de las etapas que recorre el satélite en diciembre.
Hoy, lunes 2 de diciembre, el satélite se encuentra en su fase de luna creciente. Según la NASA, la superficie visible para la Tierra está iluminada en un 2%.
La luna creciente ocurre después de la luna nueva. Foto: NASA
La próxima luna llena será el 15 de diciembre. En esta fase, la Luna está directamente opuesta al Sol en el cielo, con la Tierra entre ambos. Esto significa que la luz solar ilumina por completa la cara visible del satélite, lo que resulta en su brillo máximo desde la superficie terrestre.
Las lunas llenas pueden coincidir con eventos raros, como superlunas (cuando la Luna está más cerca de la Tierra) o eclipses lunares (cuando la Tierra bloquea parcialmente la luz solar que llega a la Luna). En esta oportunidad, la luna llena de diciembre no coincide con algún suceso astronómico inusual.
Las fases lunares en diciembre, según el portal especializado Time and Date son las siguientes:
La luna llena de diciembre es conocida como 'Luna fría' debido a su conexión con el cambio de estación en el hemisferio norte, donde marca el inicio del invierno. Este nombre refleja el frío característico de esta época del año en muchas regiones de esta parte del planeta, que está asociado con las bajas temperaturas y el ambiente helado que llega con el solsticio de invierno, que ocurre cerca de la misma fecha.
En varias culturas, la luna llena de diciembre ha sido un símbolo de la temporada invernal y sus condiciones climáticas frías. Además, algunos nombres tradicionales de los plenilunios en diferentes meses a menudo se vinculan a fenómenos naturales.