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Ciencia

Confirman que la vida puede ‘pasar ante los ojos’ cuando estamos por morir

Científicos realizaron la primera grabación de un cerebro moribundo y observaron actividad relacionada con la memoria.

larepublica.pe
Tomografías computarizadas del cerebro del paciente fallecido. Foto: Frontiers

La idea de que la vida pasa frente a los ojos cuando una persona está a punto de morir es una escena que se ha repetido en inumerables historias y relatos. No obstante, esto nunca había podido ser comprobado científicamente, hasta ahora.

Según reportó la revista científica Frontiers in Aging Neuroscience el pasado 22 de febrero, por primera vez en la historia un equipo de expertos logró monitorear un cerebro moribundo a través de una electroencefalografía. Los médicos descubrieron que el órgano presentaba aumento en la actividad cerebral relacionada con el recuerdo, la memoria y los sueños.

De acuerdo con el reporte, el hallazgo se realizó de forma accidental en un paciente de 87 años en Estonia. El hombre había sufrido una caída y fue diagnosticado con una hemorragia cerebral significativa. Posteriormente, lo operaron exitosamente y se mantuvo estable durante dos días en cuidados intensivos.

Sin embargo, pasado ese tiempo, empezó a padecer ataques epilépticos, de al menos doce episodios por día. Los médicos decidieron realizarle una electroencefalografía para rastrear y entender la actividad cerebral que provocaba las crisis.

Fue durante ese proceso que el paciente sufrió un paro cardíaco y falleció. No obstante, los datos de la actividad cerebral quedaron registrados mientras el hombre atravesaba el umbral hacia su muerte.

“Medimos 900 segundos de actividad cerebral alrededor del momento de la muerte y establecimos un enfoque específico para investigar qué sucedió en los 30 segundos antes y después de que el corazón dejara de latir”, contó a la revista el Dr. Ajmal Zemmar, neurocirujano de la Universidad de Louisville, quien analizó el caso.

Para Zemmar, lo que vieron en el cerebro del paciente fue similar a lo que sucede cuando una persona está meditando, soñando o reviviendo recuerdos pasados. Agregó que a ambos lados de la última contracción del corazón, hubo un cambio en cierto tipo de ondas cerebrales, llamadas oscilaciones gamma.

Si bien todas las ondas cerebrales comenzaron a disminuir, la gamma representó un porcentaje mayor al normal. Investigaciones anteriores establecen que estas ondas gamma son responsables de algunos procesos de alto funcionamiento y están intrínsecamente vinculadas a la concentración, los sueños, la recuperación de la memoria y la percepción consciente.

“A través de la generación de oscilaciones involucradas en la recuperación de la memoria, el cerebro puede estar reproduciendo un último recuerdo de eventos importantes de la vida justo antes de morir, similar a los informados en las experiencias cercanas a la muerte”, afirmó Zemmar.