Poeta fue fusilado hace 75 años. Con ofrendas florales en el parque que lleva su nombre, pero también con puestas en escena de sus obras más populares y representativas. Alfacar (Granada). EFE. El Federico García Lorca “más joven, más maduro y más pleno” ha vuelto a “revivir” anoche a través de su literatura y los personajes de algunas de sus obras más conocidas en Alfacar (Granada), sur de España, en el mismo entorno en el que fue fusilado hace ahora 75 años y donde se cree que yacen sus restos. Bajo la respetuosa mirada de quienes se han acercado esta noche al parque que lleva su nombre, los actos de homenaje a García Lorca han comenzado a las 21.30 horas con una ofrenda floral en el monolito situado junto al olivo donde murió fusilado y que recuerda también al resto de víctimas de la Guerra Civil. Los presentes han guardado allí, a petición de la alcaldesa de Alfacar, María José Pino (PP), un minuto de silencio que, al final, ha sido roto con gritos de “por Lorca” y varios vivas a favor de la República proferidos por un grupo de personas que portaba una bandera republicana. Acabado este breve homenaje, en otra zona del mismo parque, Sebastián Pérez (PP), presidente de la Diputación de Granada, institución encargada de organizar el acto, ha querido “proclamar al Federico que vive, en su figura, en su obra y sobre todo en su recuerdo” y ha anunciado que será distinguido, después de 75 años, como Hijo Predilecto de la Provincia. Posteriormente, se ha estrenado el montaje Federico vive, dirigido por Miguel Serrano de la compañía “Teatro para un instante”, en el que ocho actores y seis músicos han repasado buena parte de la trayectoria vital del artista a través de sus creaciones. Puestas en escenas No han faltado personajes de obras como Tragicomedia de Don Cristóbal y la señá Rosita, La zapatera prodigiosa, Doña Rosita la soltera, Mariana Pineda, Romancero gitano, Bodas de sangre o Diván del Tamarit en una representación en la que la mayoría de las palabras fueron escritas por García Lorca. El texto, como explicó su responsable, ha destacado por su dramatismo, pero en él ha habido al mismo tiempo suficientes elementos, como en la obra de Federico, para una alegre esperanza, dentro de un espectáculo “agridulce” que no ha eludido a la muerte pero sí ha hecho especial alusión a la vida. El dato La vida. Los promotores del homenaje han dicho que ahora se trata de abrir una nueva perspectiva en lo que supone una fecha triste que, desde hoy, se invoca sin embargo como “un grito de alegría y vida” que no caerá en el pesimismo ni en el derrotismo.