El secreto del pequeño orificio del candado: ¿para qué sirve y por qué es importante?
Ese pequeño orificio, que suele estar en la parte inferior siempre es la curiosidad de sus compradores, y cumple funciones más importantes de lo que parece.
- Joven peruano gana S/100.000 en concurso de HH y revela en qué gastará el dinero: "Voy a viajar a España a estudiar Medicina"
- Cines en China se vuelven virales al habilitar el ingreso de mascotas por el estreno de 'Zootopia 2'

Su principal propósito es permitir que el agua salga del interior del mecanismo, lo que ayuda a prevenir la oxidación de sus componentes. Sin embargo, su utilidad no se limita al drenaje. También resulta clave en las tareas de mantenimiento: por esa misma abertura se pueden aplicar lubricantes especiales que ayudan a conservar el funcionamiento del sistema interno.
Con el paso del tiempo, factores como el polvo, la humedad o las temperaturas extremas pueden endurecer las piezas. Introducir aceite por ese orificio permite mantener el candado en condiciones óptimas y alargar su vida útil.
En algunos modelos específicos, este agujero cumple una tercera función: sirve como acceso para llaves especiales que permiten abrir el candado en situaciones de emergencia o mediante procedimientos técnicos autorizados.
Recomendaciones para cuidar tu candado
Para asegurarte de que tu candado funcione correctamente durante más tiempo, es recomendable seguir una serie de cuidados:
- Aplicar lubricante cada 3 a 6 meses.
- Utilizar productos diseñados para cerraduras, evitando aceites de uso doméstico.
- Lubricar tanto por la ranura de la llave como por el orificio inferior.
- Limpiar la parte exterior con un cepillo suave.
- Protegerlo de la intemperie siempre que sea posible.
- En ambientes costeros o húmedos, enjuagarlo ocasionalmente con agua dulce.
- Secarlo bien si se moja.
- No forzar la llave si se traba; aplicar lubricante y esperar unos minutos.
- Comprobar que el arco se deslice sin dificultad.
- Guardarlo en un lugar seco si no se va a usar por un tiempo prolongado.

El agujero evita que el agua se filtre dentro y se oxide Foto: Radio Fórmula
¿Cómo se inventó el candado?
Los antecedentes más antiguos del candado se remontan a hace más de 4.000 años en civilizaciones como la egipcia y la babilónica. Aunque sus mecanismos eran rudimentarios en comparación con los actuales, el principio básico ya estaba presente. Más adelante, los romanos perfeccionaron estos dispositivos utilizando metales y sistemas de cierre más avanzados.
El candado moderno fue registrado en 1857 por Theodor Yale, un inventor estadounidense, cuya innovación sentó las bases de los modelos contemporáneos.



















