
El devastador terremoto de magnitud 9,0 que destruyó Lima y provocó un tsunami en el Callao: dejó más de 20.000 personas fallecidas
En la noche de octubre de 1746, la ciudad del virreinato de Lima fue azotada por un terremoto de magnitud 9.0. Apenas veinte minutos después, un tsunami con olas de hasta 20 metros cubrió el Callao, inundando miles de viviendas.

El 28 de octubre de 1746, un terremoto de magnitud 9.0 en la escala de Richter sacudió la ciudad de Lima, sorprendiendo a miles de ciudadanos durante la noche. En cuestión de minutos, la capital quedó sepultada bajo los escombros: cientos de casas fueron destruidas, dejando un saldo de cerca de 20,000 muertos. Sin embargo, el desastre no terminó allí: un devastador tsunami arrasó el puerto del Callao, inundando las viviendas de los residentes.
A lo largo de la historia, Perú ha registrado fuertes sismos, como el ocurrido el 15 de agosto de 2007, cuando un terremoto de magnitud 7.9 afectó la ciudad de Pisco. Sin embargo, el más devastador de todos, ocurrido durante la época del Virreinato, fue el que azotó tanto a Lima como al Callao, dejando una profunda huella en el país.
¿Cómo fue el devastador terremoto de 9.0 que destruyó Lima y el Callao?
Eran las 10:30 p.m de la noche de 1746, cuando un violento terremoto sorprendió el centro del Virreinato del Perú. El suelo temblaba con violencia, y las murallas que rodeaban la ciudad de Lima en ese entonces se derrumbaron, atrapando bajo los escombros a quienes no lograron escapar de sus hogares o intentaban huir por las oscuras calles.
Cuando el temblor finalmente cesó y el suelo dejó de moverse, parecía que la calma había regresado. Sin embargo, apenas 20 minutos después del terremoto, un devastador tsunami azotó las costas del puerto del Callao y otras zonas de la costa central peruana.

Así quedó una construcción tras el terremoto de 9.0 en Lima. Foto: TV Perú
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Las gigantescas olas, que alcanzaron alturas entre 10 y 24 metros, devastaron por completo el puerto del Callao y sus zonas aledañas, dejando a su paso una población prácticamente desaparecida. De los aproximadamente 5.000 habitantes que residían en el Callao en aquel momento, apenas unos 200 lograron sobrevivir a la tragedia. La violencia del mar también arrastró barcos anclados mar adentro o los destruyó por completo, evidenciando la magnitud del desastre.
De acuerdo con los relatos históricos del marqués de Obando, la ciudad, antes llena de vitalidad y movimiento, se convirtió en un escenario sombrío dominado por el caos y la desesperación “En el susto excesivo, que se apoderó de todos los habitantes, cada uno buscó su remedio en la huida”, narró el cronista, reflejando la gravedad del momento.