Sociedad

¿Tu conviviente o cónyuge abandonó el hogar? Conoce qué acciones legales puedes tomar ante esta situación

El abandono de hogar se da cuando uno de los miembros de la pareja deja la vivienda de forma unilateral. Esto puede derivar en demandas legales o ser motivo de divorcio.

La denuncia por abandono de hogar no será válida si el cónyuge comunica sobre su nuevo domicilio. Foto: difusión
La denuncia por abandono de hogar no será válida si el cónyuge comunica sobre su nuevo domicilio. Foto: difusión

El abandono de hogar ocurre cuando uno de los miembros de la pareja decide ausentarse de la vivienda o del domicilio familiar de manera unilateral. Esta situación puede generar consecuencias legales, especialmente si la persona que se retira deja de cumplir con sus responsabilidades y pone en estado de desamparo a los dependientes, como hijos menores o personas bajo su cuidado.

En estos casos, el abandono no solo puede dar lugar a una demanda judicial para exigir el cumplimiento de las obligaciones familiares, sino que también puede ser considerado como causal de divorcio.

¿El abandono de hogar es un delito? Esto dice el Código Civil

La abogada de familia, Lorena Meza, explicó, en diálogo previo con La República, que en el Perú el abandono del hogar no está tipificado como delito. Sin embargo, si quien abandona el hogar incumple sus responsabilidades y deja en situación de desamparo a quienes convivían con ella, podría enfrentar repercusiones legales.

“Abandonar a los hijos no prestando alimentos o los cuidados indispensables sí es un delito en el Perú, y será mayor la responsabilidad penal si ocurren daños o la muerte del menor como consecuencia de este abandono”, indica Meza. De igual manera, la abogada especialista en familia enfatizó que también es un delito el abandono a los padres que se encuentren en situación de dependencia.

¿Qué debo hacer en casos de abandono de hogar?

El primer paso para abordar un caso de abandono del hogar es presentar una denuncia en la comisaría más cercana a la vivienda de la persona afectada. Este procedimiento formaliza el reclamo y permite iniciar las acciones correspondientes.

Según la abogada Lorena Meza, una vez realizada la denuncia, un efectivo policial acudirá al domicilio para verificar la situación. Posteriormente, se emitirá un documento oficial conocido como constancia de abandono de hogar, el cual sirve como respaldo legal para futuros procedimientos.

Es fundamental que la persona afectada recopile toda la información y pruebas necesarias para sustentar su denuncia, con lo cual se garantiza un proceso más ágil y efectivo.

¿El abandono de hogar también solo se aplica en casos de matrimonios formales?

El abandono de familia también aplica a parejas que no están casadas (convivientes), siempre que se deje en estado de desamparo a ascendientes, como padres adultos mayores, descendientes, como hijos, o personas bajo tutela.

¿Cuáles son las excepciones a la demanda por abandono de hogar?

La denuncia por abandono de hogar no será válida si el cónyuge o conviviente comunica su nuevo lugar de residencia y si sigue cumpliendo con sus responsabilidades familiares.

“Para que podamos afirmar que exista aquella figura, la persona que abandona debe tener la clara intención de sustraerse de todas sus obligaciones familiares”, indicó Meza.

¿Cuál es la diferencia entre el retiro voluntario y el abandono del hogar?

El concepto de retiro voluntario del hogar no está contemplado en la legislación procesal. Sin embargo, cuando el abandono del hogar se realiza por mutuo acuerdo, el procedimiento resulta más sencillo.

En caso de que la pareja decida seguir conviviendo, simplemente se separan y dejan la documentación necesaria para que cualquiera de las partes, en el futuro, pueda iniciar una acción judicial y formalizar la separación legal.

Asimismo, si los esposos optan por la separación y desean registrar esta decisión ante la autoridad policial, tienen la posibilidad de hacerlo. Posteriormente, pueden elegir un divorcio administrativo o, si prefieren, tomarse un tiempo antes de solicitar una separación convencional ante una autoridad judicial, con lo cual se formaliza el cese de la convivencia.