Violencia contra la mujer se ha exacerbado: más de 67.000 casos a nivel nacional
De enero a mayo del 2024 se han registrado más de 67 mil denuncias en los Centros Emergencia Mujer (CEM). Solo en Lima, el Poder Judicial emitió 3.778 órdenes de protección para las víctimas, pero esto solo queda en el papel.
La violencia contra la mujer es uno de los graves problemas que afrontamos como sociedad y sobre el cual poco se ha avanzado desde el Estado, de acuerdo a las últimas cifras oficiales.
Estas agresiones, que muchas veces ocurren dentro del hogar, suelen ser el preámbulo de potenciales feminicidios. Las historias de Lorelei, Katty y Angelina, las cuales te contaremos en este informe, son una muestra de esta vulnerabilidad en la que viven.
Los 3 agresores de mujeres. Foto: LR
Perfil agresivo: 43 llamadas en una noche
Brayan David Marchán Zubiaga, a punta de amenazas de muerte e insultos, se convirtió en la peor pesadilla para Lorelei. Lo conoció en el 2015 y tuvieron un hijo. “Se volvió una persona agresiva”, recuerda ella. En 2017 se fueron a vivir a Italia por trabajo, pero los maltratos físicos y psicológicos se agudizaron.
La víctima lo denunció y volvió a Lima para refugiarse en su familia. Sin embargo, el agresor, luego de 5 años en los cuales según Lorelei habría estado preso por robo, volvió al país. El 29 de junio, por teléfono, Marchán le exigió verla. “Como le dije que no, me amenazaba con matarme. Me llamó hasta 43 veces en una noche”, detalla.
Lo bloqueó de WhatsApp. El atacante llegó a las 4 am al domicilio con un cuchillo. De forma criminal, pretendía romper la puerta para acabar con la joven madre. Llegó el progenitor del agresor e intentó llevárselo. Luego de forcejear, Bryan acuchilló a su propio padre.
Actualmente, ese sujeto tiene 9 meses de prisión preventiva, pero Lorelei teme que salga libre. Espera que las autoridades les brinden medidas de protección para que este no se le pueda acercar. La Corte de Lima, durante el primer semestre de este año, emitió 3.778 medidas de este tipo.
No obstante, la protección no es realmente efectiva, pues no hay la capacidad policial suficiente para vigilar el cumplimiento. La policía minimizó su denuncia: “Es una peleíta”
Foto: Geo Violencia Sexual
La historia de horror de Katty
En Trujillo, César Miraval Shupingahua agredió físicamente a su pareja, la comunicadora social Katty. La víctima señala que, cobardemente, este la golpeó en diversas partes del cuerpo hasta dejarle inconsciente.
Tras este episodio, la afectada llegó decidida a denunciarlo ante la policía, pero la respuesta fue lamentable.“Nunca me he sentido protegida. Cuando fui a sentar la denuncia, en la PNP me preguntaron si estaba segura o quizás era solo una peleíta de enamorados y que lo piense bien.
Luego que insistí, en la Fiscalía pude presentar todas las pruebas de mis lesiones y un audio donde se escucha que me está golpeando y se le oye decir que me va a matar”, puntualiza. Después de un año, sostiene Katty, el agresor se acogió al principio de oportunidad y evadió todas las sanciones. “Nos dicen muchas veces que denunciemos. Yo denuncié, pero no obtuve justicia”, contó decepcionada.
Después de la agresión, tuvo que someterse a una cirugía plástica. Se quedó sin ahorros y empleo, mientras que su agresor continuó con su vida cotidiana.
Por otra parte, en marzo de este año, en Arequipa, la miss del distrito de Sachaca denunció públicamente la agresión que sufrió por parte de su expareja Jean Franco Héctor Alfaro Amezquita. La agraviada puso la denuncia ante la PNP. Por el momento, el agresor está con medidas de restricción.
Foto: Andina
Cifras de violencia no disminuyen
El Programa Nacional para la Prevención y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar (Aurora), del Ministerio de la Mujer, es la unidad de respuesta rápida ante este tipo de ataques.
Según la estadística que manejan en dicho portafolio, de enero a mayo del 2024 han recibido a través del Centro de Emergencia Mujer (CEM) un total de 67.603 casos de violencia familiar, de los cuales 85.1% fueron contra mujeres.
Esta cifra es alarmante, pero lo es aún más saber que el 2023, en el mismo período, se registraron 67.000, es decir, la situación no ha mejorado. En tanto, en esos meses, 80 mujeres fueron asesinadas y hubo 89 tentativas.
¿Cuál es la situación a nivel nacional?
Según el registro oficial del Ministerio de la Mujer, los departamentos con mayor índice de violencia son Lima (17.916), Arequipa (6.641), Cusco (4.530), Áncash (3.700), La Libertad (3.386) y Piura (3.132).
En Lima Metropolitana, en tanto, los distritos con mayores reportes de violencia son Ate, Lima y Puente Piedra.
¿Qué se está haciendo en prevención y atención?
Milagros Ríos García, directora de la Unidad de Prevención de Aurora, explica que la mayoría de atacantes son las parejas o exparejas. En tanto, el tipo de agresión más frecuente que llega al CEM es la psicológica, seguida por la física y sexual.
Igualmente, explicó que la base de estos actos de violencia son el machismo, la discriminación hacia las mujeres, la tolerancia social a estos actos y los estereotipos.“Necesitamos tener un compromiso no solo del Ejecutivo, sino también de los gobiernos regionales y locales. También debemos cambiar esa idea en los hombres de que la mujer es de su propiedad”, aseveró.
Asimismo, según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes), el 45% de mujeres no busca ayuda, lo cual evidencia que el contexto de violencia sería mucho mayor al registro oficial. Ante esto, el programa Aurora ha implementado proyectos que buscan acompañar e informar.
Ríos García detalla que uno de ellos es “Mujeres acompañando mujeres”, donde psicólogas comunitarias asisten a establecimientos públicos en busca de víctimas para orientarlas a canalizar y sostener sus denuncias.
Esto último porque el 18% de las mujeres que se acercan al CEM para reportar el maltrato abandona el caso. “Hasta el momento hay 4.360 mujeres formadas como mentoras para el acompañamiento a 3.220 víctimas”, detalla. Otro de los factores que facilitan el maltrato en el hogar es el sometimiento mediante el dinero.
En busca del empoderamiento femenino
El club “Formándose para la vida”, tiene como fin que las mujeres puedan desarrollar y conseguir fuentes de ingresos. Nos acercamos a Arequipa para conocer más. Gabriela Chambi Pilco (27) es una de las promotoras en esta ciudad. Cuenta que sufrió violencia psicológica. La situación la llevó a cuadros de depresión.
Tras recibir los cursos del club, que duran tres años, generó emprendimientos en jardinería y repostería que le permiten solventar los gastos para mantener a su hija de 9 años.
También estuvimos en La Libertad. Allí conocimos otro programa de Aurora, “Hombres por la igualdad”. Es una red de varones líderes que se comunican con otros hombres para cambiar los pensamientos, actitudes y creencias de aquellos que justifican la violencia contra las mujeres. Se encargan de promover la igualdad de género a través de charlas, talleres y ferias.
Eder Asmat Asmat, especialista social comunitario, cuenta que en lo que va del año se han formado 70 líderes en diferentes provincias de La Libertad. Uno de ellos es Luis Manuel Espinoza Bocanegra, voluntario de 38 años que vive en el distrito trujillano de Moche.
Reconoce que tenía actitudes impulsivas y machistas, lo que puso en riesgo la relación con su pareja. “A raíz de esto empecé a buscar ayuda por las redes sociales. Llamé a la Línea 100, seguí buscando y encontré al grupo, llevo tres años y mi vida ha mejorado”, reflexiona.“Hay poco presupuesto y desorganización”.
La violencia se ha acrecentado
Rocío Gutiérrez Rodríguez, subdirectora del Movimiento Manuela Ramos, organización feminista peruana, sostiene que la violencia se ha exacerbado en los últimos años. “Tenemos una presidenta que no tiene conciencia de género. Hay un Congreso que ha producido normas que socavan la comprensión de las bases de la violencia. Hay legisladores que tienen entre sus antecedentes denuncias por violencia física, psicológicas, etc.”, declaró.
Señaló que la falta de voluntad política se traduce en un presupuesto inadecuado y falta de organización. “La atención a la violencia es una de las que menor presupuesto recibe”.
Cuestionó el acceso a justicia debido a la falta de capacitación sobre enfoque de género o derechos humanos, por ejemplo, en las comisarías. “No puede ser aún hoy en día una mujer vaya a la comisaría y el policía la cuestione, se burle o la culpe, revictimizándola”, concluyó.
Lorelei, Katty y Angelina, por lo pronto, seguirán viviendo en la incertidumbre. ¿Hay esperanzas para ellas y otras mujeres víctimas? Es una tarea cuya solución parece lejana para nuestras autoridades.
Canales de ayuda:
Si eres o conoces a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en brindar información, orientación y soporte emocional.
Además, tiene la facultad de derivar los casos más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).