Los otros Run Run: se registraron más de 1.000 hallazgos de animales silvestres en 2022, según Serfor

Cada 3 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Vida Silvestre y Perú es uno de los países con mayor diversidad biológica en el mundo. Además de su riqueza paisajística y variedad de plantas y flores, en territorio peruano habitan cientos de especies de animales de distintos tipos. Sin embargo, muchos de ellos están en peligro, ya sea por la destrucción de los espacios naturales donde viven o por ser extraídos para ser vendidos ilegalmente. Hace dos años, se viralizó la historia de Run Run, un pequeño zorro que había sido comercializado como un perro en Lima. Así como este, miles de casos son atendidos a lo largo de los años.

¿Cuántos animales como Run Run han sido rescatados últimamente? ¿Qué se está haciendo desde el Estado para reducir este crimen en el ámbito nacional? Conversamos con un especialista del Servicio Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) para responder a estas y más preguntas.

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Tan solo en 2022 se realizaron 1.040 intervenciones por hallazgos de animales silvestres en abandono y 100 decomisos, según Jesús Lescano, especialista en conservación y manejo de fauna silvestre del Serfor.

“Los decomisos se dan cuando hay una denuncia y se interviene a una persona que posee un animal, mientras que un hallazgo es cuando, entre comillas, se encuentra fauna abandonada. En ambos casos, los animales han sido extraídos de sus hábitats. Al estar en una ciudad, se entiende que el animal ya estuvo en contacto con humanos”, explica el especialista.

Actualmente, aún no se tienen cifras de lo que va del año 2023, pues la data se actualiza de forma trimestral. Por lo pronto, se sabe que, el año pasado, en Lima se realizaron la mayor cantidad de hallazgos: 191. Mientras que, en Arequipa, se llevaron a cabo más intervenciones por decomisos: 23.

¿Cuáles son los animales más comercializados ilegalmente?

“En Lima encontramos todo tipo de animales porque es el destino al cual llega la fauna extraída de todas las regiones. Se pueden encontrar tortugas que vienen de Loreto, ranas que vienen de Puno o monos que vienen de Pucallpa”, comenta Lescano.

Mientras tanto, en las regiones de la sierra, es más frecuente decomisar ranas porque son usadas en jugos. Las ranas del lago Titicaca, pese a estar en peligro de extinción, son los anfibios más comercializados en el país.

Por otro lado, en las regiones de la Amazonía, los animales más frecuentes de hallar son las tortugas taricaya y las tortugas motelo. Ambos reptiles son utilizados como mascotas y también para alimento, indica el especialista.

Además de ello, Lescano señala que, entre las criaturas más vendidas en el mercado negro, están los monos de diversas especies y las aves, sobre todo, los loros y los guacamayos. Entre otras modalidades de venta, también están los colmillos, cráneos y pieles de jaguar, especies que suelen ser cazadas para luego vender sus partes como ornamentos.

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¿Qué pasó con Run Run?

“Si bien los zorros no son los animales más decomisados ni más traficados, el caso de Run Run es el típico ejemplo de lo que sucede día a día y que no se visualiza. Y es que un animal silvestre es extraído de su hábitat cuando es pequeño, y es llevado a una ciudad. Luego, recién es decomisado o entregado cuando es adulto y empiezan a haber problemas”, comentó el vocero de Serfor respecto al famoso zorro.

Actualmente, Run Run se encuentra en la Granja Porcón, en Cajamarca. “Está bien, no hemos tenido ningún reporte de enfermedad o de algún problema. Está estable, está haciendo su vida como cualquier otro zorro de zoológico”, señala.

Cabe recordar que, al igual que este caso, la mayoría de los animales no pueden volver a su lugar de origen luego de ser rescatados de la venta ilegal. “Son varios factores que, al final, imposibilitan reintroducirlo. Eso ya es una pérdida para la naturaleza. El animal ya adquirió enfermedades que, en estado natural, no hubiera adquirido”.

Crimen organizado

El tráfico ilegal de animales silvestres recién ha sido considerado como crimen organizado por la ley peruana desde junio de 2022, pese a haber sido una propuesta legislativa años anteriores. “Esto permite abordar el problema desde una perspectiva más amplia, así como también incrementar las penas, algo que mucha gente reclamaba o notaba. Anteriormente, se realizaban intervenciones, pero las personas no iban a la cárcel porque las penas eran muy pequeñas y, al final, no se hacían efecto”, indica el vocero de Serfor.

“Al tratarse ya de un crimen organizado —como en realidad lo es, porque, lamentablemente, hay mafias detrás del tráfico de fauna silvestre—, esto cambia. El escenario es reciente, las penas que se den y el número de sancionados lo vamos a ver todavía en algún tiempo, pero este cambio ya se dio”, agrega.

Según la Ley de Crimen Organizado (Ley 30077), en la que ahora se incluye este delito, ahora es posible el uso de técnicas especiales de investigación ante los casos, mayores plazos de investigación preparatoria, aumento de las penas y no se necesita autorización fiscal para que la Policía realice las incautaciones.

“Por otro lado, también venimos trabajando en el plan 2023-2027 de la Estrategia Nacional para combatir el tráfico ilegal de fauna silvestre. Este es un plan de diez años y estamos en el segundo quinquenio”, señaló Jesús Lescano.

Finalmente, teniendo en cuenta que se trata de un crimen que opera con redes internacionales de venta, otra medida en la que se está avanzando es la coordinación con países vecinos para un mejor control en las zonas limítrofes. “Por ejemplo, hay fauna de Colombia que se vende en Perú y hay fauna de Perú que se vende en Colombia. Y esto sucede porque muchas de nuestras fronteras no son tan fuertes. Al notar esta problemática, estamos mejorando los lazos con nuestros pares para abordar este problema, no solo desde Perú, sino como región”, explicó.

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Riesgos para la salud

Al tratarse de tráfico ilegal de animales, es importante recordar que uno de los principales riesgos que ocasiona este crimen no solo constituye perjuicios para la vida silvestre, sino que también genera amenazas para la salud humana. Las especies silvestres son portadoras de microorganismos que pueden ser transmitidos a los humanos y dar origen a nuevas enfermedades como las denominadas enfermedades zoonóticas. Un ejemplo reciente es el de la influenza aviar, que actualmente no ha registrado contagios a personas en Perú, pero sí en otros países.

"El tema de salud es trabajado de forma intersectorial. Serfor, actualmente, trabaja en conjunto con Senasa, con Sernanp, con Agrorural y con el Ministerio de Salud (Minsa) en una Comisión Multisectorial permanente para la prevención y control de enfermedades zoonóticas", indicó Lescano. Según el especialista, se vienen realizando investigaciones para obtener información que permita tomar mejores decisiones ante posibles amenazas a la salud.