Loreto: 56 comunidades nativas siguen en pie de lucha por derrame de petróleo
El vertido de hidrocarburos en el kilómetro 56 del Oleoducto Nororiental no solo está afectando la salud e integridad de los ciudadanos, sino también los ecosistemas. “Estamos tomando agua contaminada”, dice el apu Gilberto Inuma.
Las comunidades urarinas de Loreto expresaron su indignación, a través de protestas en el territorio del pueblo nativo de Nueva Unión, ante la respuesta gubernamental con respecto al último derrame de crudo en el kilómetro 56 del Oleoducto Norperuano.
El vertido de hidrocarburos ha afectado a 56 colectividades y sus repercusiones están volcadas fundamentalmente en la cuenca del río Chambira, una de las más importante vías fluviales de la Amazonía.
Como se sabe, el 6 de junio, a las 4.00 a. m. aproximadamente, se registró el derrame de petróleo en el km 56 del Oleoducto Trompeteros-Saramuro afectando las localidades de Petrolera y Santa Teresa, en el distrito de Urarinas, provincia de Loreto.
Desde entonces, las comunidades se han visto condenadas a vivir esta pesadilla que no solo afecta su vida e integridad, sino también su dignidad, ante la indiferencia del Estado.
Son colectividades ribereñas cuya identidad está marcada por su cercanía al río y las quebradas. Quedarse sin agua, sin peces para alimentarse, sin su mundo simbólico subacuático, es perderlo todo.
“Tomamos agua contaminada”
“Estamos tomando agua contaminada. El pueblo está en pie de lucha hasta que el Estado resuelva las demandas de las comunidades de la cuenca del río Chambira”, señala el apu Gilberto Inuma, presidente de la Federación de Pueblos Indígenas Urarinas de la Cuenca del Chambira-Rio Chambira (Fepiurcha).
Afirma que la población nativa pide la respuesta urgente del presidente Pedro Castillo, el premier Aníbal Torres y del ministro de Salud, Jorge López, ya que han pasado 59 días desde que firmaron un acta de acuerdos que implicaba atender sus demandas.
“Como Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), nos unimos al llamado de nuestros hermanos y hermanas urarinas e instamos a la Defensoría del Pueblo y a la Comisión de Pueblos Indígenas del Congreso de la República a fiscalizar al Ministerio de Salud y al Gobierno Regional de Loreto”, enfatizó Inuma.
“Estamos acá unidos con dos federaciones organizadas para poder defender y salvaguardar la integridad de los pueblos originarios, ya que el Estado ha excluido y sigue discriminando”, indicó el apu.
Protestas en la selva. Foto: AIDASEP
Exigen derechos básicos
Las comunidades urarinas, representadas en la Fepiurcha y la Federación de Indígenas Urarinas del Río Chambira (Feiurcha), se han ubicado en el Kilómetro 92, en el territorio de la comunidad nativa Nueva Unión (Loreto), para bloquear el río como medida de lucha y así lograr la atención de derechos básicos, como acceso al agua y salud, entre otros.
Asimismo, el presidente de Fepiurcha reiteró que ya han presentado la problemática y los puntos de la agenda de las asociaciones del Chambira al Poder Ejecutivo, pero que, hasta el momento, no han tenido ninguna comunicación ni convocatoria a una mesa de diálogo para atender sus demandas.
Además, ya había denunciado que, sin sustento alguno, el Minsa quitó la brigada intercultural que atendía a las a los pobladores del río Chambira, lo que “es un acto discriminatorio que está teniendo como consecuencia la desatención de enfermos graves”, expresó el Gilberto Inuma.
“Desde la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana, respaldamos la lucha de nuestros hermanos y hermanas del pueblo Urarina. En ese sentido, exigimos que las autoridades atiendan sus demandas sociales y protejan los derechos humanos, evitando cualquier tipo de represión”, indicaron desde Aidesep.