Sociedad

Volcán Sabancaya de Arequipa con alerta naranja: ¿qué significa y cuáles son las medidas?

El Instituto Geofísico del Perú (IGP) emitió alerta para macizo en Caylloma, el cual registra hasta 54 explosiones diarias y más de 400 sismos de origen volcánico.

El volcán Sabancaya es el único del Perú que actualmente está en erupción. Foto: Andina
El volcán Sabancaya es el único del Perú que actualmente está en erupción. Foto: Andina

Con nivel de alerta naranja se encuentra el volcán de Sabancaya, localizado en provincia de Caylloma (Arequipa). El Instituto Geofísico del Perú (IGP) dispuso en su último boletín que las personas no deben acercarse a un radio menor de 12 kilómetros al cráter y que las comunidades aledañas requieren estar en alerta ante cualquier tipo de evento con origen volcánico.

Según el IGP, el monitoreo del Sabancaya fue desarrollado entre el 9 y 15 de mayo. De esta forma, se registró la ocurrencia de 54 explosiones diarias y más de 400 sismos de origen volcánico.

¿Qué significa la alerta naranja?

El IGP explicó que la alerta naranja consiste en la ocurrencia de 406 sismos de origen volcánico asociados a la circulación de fluidos magmáticos en su interior, así como el movimientos de tipo volcano-tectónico que están ligados al fracturamiento de rocas en el interior del macizo.

Sin embargo, hay que resaltar que la actividad se mantiene en niveles moderados y que las explosiones diarias generan columnas de ceniza y gases de hasta 2,5 kilómetros de altura sobre la cima.

“Para los siguientes días no se esperan cambios significativos respecto a su actividad eruptiva”, señaló la entidad sobre el Sabancaya.

¿Cuáles son las medidas?

Ante ello, el IGP recomendó a las comunidades aledañas tomar las previsiones necesarias. Además, que en caso de caída de ceniza, los ciudadanos se cubran la nariz y boca con paños húmedos o mascarillas. También mantener cerradas las puertas y ventanas de las viviendas e informarse permanentemente.

En el 2016, el Sabancaya entró en proceso eruptivo, tiempo desde el cual es monitoreado por los especialistas a través del Observatorio Vulcanológico.