Sociedad

Delincuente sentenciado a 22 años de prisión escapa de hospital al que fue evacuado

Pedro Moncayo Julcahuanca era custodiado por personal policial en el Hospital Regional de Lambayeque. Las autoridades informaron que ya es intensamente buscado.

Sentenciado fugó pese a estar custodiado por la Policía. Foto: composición La República
Sentenciado fugó pese a estar custodiado por la Policía. Foto: composición La República

La tarde del sábado 26, el delincuente Pedro Moncayo Julcahuanca, de 39 años, alertó a los agentes penitenciarios de la cárcel de Chiclayo y se quejó de dolor. Lo trasladaron al Hospital Regional de Lambayeque; sin embargo, en un descuido se fugó esta madrugada. Todavía está prófugo y es intensamente buscado.

Según fuentes policiales, Moncayo estaba sentenciado a 22 años por robo agravado.

Cuando llegó al hospital, todo indicaba que tenía peritonitis, por lo que esperaban el resultado de unos estudios para confirmar la internación o la posible cirugía.

“Estaba con un custodio que lo acostó y le puso las esposas. Enganchó una en la cama y la otra al brazo izquierdo”, confirmaron los investigadores.

A través de un comunicado, el Instituto Nacional Penitenciario informó que el interno fue evacuado al nocosomio al promediar la 1.00 p. m., con el documento N.º 017-2022-INPE-ORNCH-E.P-CHY/G.02-LMP, mientras era resguardado por personal de seguridad.

El sujeto quedó hospitalizado bajo responsabilidad de la Policía Nacional del Perú. Sin embargo, a las 3.20 a. m. de este domingo 27 de febrero, empleados del INPE del área correspondiente recibieron la llamada telefónica del efectivo Luis Diaz Prada a fin de indicar que el interno se fugó del hospital.

Moncayo Julcahuanca era albergado en la cuadra 7, pabellón 4, del régimen cerrado ordinario.

El 2 de enero del 2008, Rosa Bardales Llayes y otras tres amigas vivieron horas de terror cuando dicho sujeto y otros cómplices las secuestraron para robarles.

Moncayo fue quien le apuntó con un arma de fuego luego de que les prestara un servicio de taxi, pero las desvió del camino hacia una pampa. Él las hizo bajar del vehículo para sustraerles sus celulares y otros documentos personales. Finalmente huyó junto a una de sus víctimas bajo amenaza.

Les dijo que, si denunciaban a la policía, las iba a matar porque las tenía identificadas. Incluso las amenazó con abusar sexualmente de ellas.