Sociedad

¿Cómo asistir a una víctima de violencia de género si recurre a mi ayuda?

Las declaraciones de Vania Bludau sobre su exrelación con Mario Irivarren han evidenciado lo complicado que es pedir ayuda para una víctima de violencia de género, especialistas indican que no es fácil afrontarlo, por lo que brindan algunas recomendaciones.

Cualquier persona puede denunciar violencia de género. Foto: ONU Mujeres
Cualquier persona puede denunciar violencia de género. Foto: ONU Mujeres

Vania Bludau acusó a Mario Irivarren de agresión física en el programa Magaly La Firme, lo que evidenció lo difícil que es hacer frente. La violencia de género en Perú es una de las problemáticas que pareciera nunca acabar. De acuerdo a datos del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), se han atendido 117.414 casos de violencia entre enero y octubre de 2021. De esa cantidad, cerca de 64.000 corresponden a violencia psicológica, más de 53.000 a agresión física, 18.000 al índole sexual y 534 al económico.

Del total de casos registrados, el 68% de las víctimas eran niñas y adolescentes, mientras que el 32% restante eran adultas. Si embargo, las vidas de las mujeres no solo corren peligro en Perú, sino a nivel mundial, ya que América Latina es la según región más letal del mundo para las féminas. Ante este duro panorama, especialistas brindan algunas recomendaciones para saber cómo ayudar a una víctima de violencia de género si acude a nuestra ayuda.

Vía legal

La abogada Cynthia Silva, de la organización feminista Demus, resalta que cualquier persona puede denunciar los actos de violencia de género. “Dentro de nuestro marco legal existen las posibilidades de que cualquier persona —sea familiar, amistad o vecino— está legitimada para interponer cualquier tipo de reporte en la comisaría o solicitar uno de, por ejemplo, el Centro de Emergencia Mujer del distrito o del lugar donde suceden los hechos”, indica la jurista.

¿Cómo reportar estos casos ante las autoridades peruanas? Hay cinco servicios que el MIMP ofrece.

Ayuda psicológica

Si de manera directa se desea acompañar a la víctima, primero hay que saber si la persona que nos ha contado está en las posibilidades emocionales de hacer una denuncia. “Cuando se pasa por un proceso de violencia, las implicancias en algunos casos son físicas, pero en la mayoría de casos son psicológicas. El mismo CEM ha detallado que la mayoría de denuncias en este año son de violencia psicológica”, detalla Cynthia Silva, abogada de Demus.

Para las víctimas es complicado tomar la decisión de denunciar. Por ello, cuando acuden a contar los sucedido a la persona más cercana es porque, por lo general, necesitan algún tipo de consejo, asegura Silva. “Lo primero que debemos tomar en cuenta es no responsabilizar ni prejuzgar a la persona que está pasando por violencia. Este tipo de preguntas hacen que ella se sienta responsable de lo que le está pasado y se sienta culpable”, afirma.

La psicóloga especialista en género Omayra Chauca recalca que es importante considerar que la víctima, para llegar a contar el caso, “ha tenido que atravesar ciertas barreras que la limitaban a ella misma, como la vergüenza o miedos”. La experta indica algunos pasos para poder apoyar psicológicamente a la víctima cuando recurre por ayuda.

  • Escucha activa

Escuchar sin juzgar. Las personas solemos emitir primero nuestros juicios de valor, tales como “tú decidiste estar con él”, “tú lo permitiste”, “tú siempre regresas con él” o “es tu culpa”. Las personas suelen juzgar culpabilizando a la víctima, pero solo debemos escuchar, entender y decirle que la acompañamos en su dolor.

  • Respetar la decisión de la víctima

“Si ella tiene los ánimos de denunciar, entonces acompañarla en el proceso de la denuncia. Si no se anima a hacerlo, también respetar esa decisión”, sugiere.

  • Hacerle saber que tiene un espacio seguro de apoyo

“Que sepan que cuentan con un punto de apoyo o un espacio de cuidado. Para que la víctima salga de la violencia, no es que sale de un día para otro. Suele pedir ayuda, pero —en ese tránsito— las personas suelen terminar juzgando y lo que hacen es alejarla. Eso rompe los canales que podrían ser sus puntos de apoyo o de ayuda para salir de la violencia”, concluye.