Cusco: estudio confirma que pobladores de Espinar tienen metales pesados en el cuerpo
Contaminación. Muestras se aplicaron a 150 habitantes localizados en zona de influencia de Xstrata Tintaya. Pero aún no se determina la causa de la contaminación.
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Por: Zaida Tacsi
Un nuevo estudio confirma que el 78% de las muestras tomadas a habitantes de la provincia de Espinar tiene contaminación por metales pesados por encima de los límites permitidos.
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Las conclusiones corresponden a Amnistía Internacional con apoyo de la organización Derechos Humanos Sin Fronteras del Cusco.
La representante de Derechos Humanos, Karen Luque, sostuvo que este estudio demuestra que no se implementó políticas para disminuir los niveles de contaminación en esta provincia.
“Desde 2010 se ha ido probando la existencia de sustancias tóxicas en niveles no permisibles, así como el agua no apta para el consumo humano. Se hizo poco para prevenir”, argumentó.
La investigación se efectuó entre 2018 a 2020. Estuvo a cargo del experto en salud ambiental Fernando Serrano, de la Universidad de Saint Louis, Missouri. Tomaron muestras de sangre y orina a voluntarios de once comunidades indígenas localizadas en el área de influencia del proyecto minero Antapaccay Expansión Tintaya – Integración Coroccohuayco, propiedad de la transnacional anglo-suiza Glencore.
Los resultados detallan que más de un 58% presentó niveles elevados de arsénico. Esta sustancia es tóxica. Puede producir vómitos, disminución del número de glóbulos rojos y blancos en la sangre y ritmo cardíaco anormal.
Más del 29% concentra altos niveles de manganeso. Este metal puede acumularse en el cerebro, huesos, hígado, riñones y páncreas.
Para Luque de Derechos Humanos, lo más grave es haber hallado cadmio en 12% de los investigados, 4% tenía plomo y más del 3% mercurio.
Los estudios también alcanzaron a las fuentes hídricas. De las 191 muestras la mayoría arrojó presencia de coliformes fecales. De esas 191 muestras 115 son utilizadas para consumo humano, lo que significa que no es limpia ni segura. De acuerdo con los testimonios de los comuneros de Espinar, al no tener acceso a otras fuentes, se ven obligados a consumir de esas fuentes de agua.
Los estudios no determinan cuál es la causa de la contaminación. Los afectados todavía no saben cómo los metales y las sustancias tóxicas han llegado a su cuerpo.
La bióloga Karen Luque lamentó que el Estado aún no implemente el plan de mitigación y reparación para las personas con metales pesados, pese a una sentencia judicial definitiva que consiguieron el año pasado. Según el registro de Derechos Humanos, en Espinar son mil 662 personas con esas sustancias tóxicas.
A la espera de diálogo en Chumbivilcas
La comunidad de Collana del distrito chumbivilcano de Velille exige ser considerada en el área de influencia directa del proyecto minero Constancia de la empresa Hudbay. Su reclamo no optó por el diálogo y los comuneros decidieron tomar la carretera que permanece bloqueada hace cinco días. Su dirigente, Daniel Colque Apaza, sostuvo que sufren los impactos sociales y ambientales de la minera.
Por su parte, el vocero de Hudbay, Javier Escudero, indicó que manejan una serie de propuestas para atender las quejas de los comuneros, pero que el entendimiento será posible sin bloqueos de por medio que actualmente evita el paso de trabajadores y provisión de insumos. Mencionó que se están realizando proyectos en la zona.
Para hoy se espera una Mesa de Diálogo mediada por el Ministerio de Energía y Minas.
