Sociedad

Los Quispe Palomino ordenaron matar a toda una familia en el Vraem

Venganza terrorista. Víctimas eran miembros de un comité de autodefensa en un pueblo de Ayacucho y recibían amenazas. La Dircote-PNP ya identificó a los asesinos y les siguen el rastro.

Dolor. El múltiple asesinato de los miembros del comité de autodefensa de Huarcatán ha causado conmoción en Ayacucho. Foto: difusión
Dolor. El múltiple asesinato de los miembros del comité de autodefensa de Huarcatán ha causado conmoción en Ayacucho. Foto: difusión

Mientras patrullas del Comando de Inteligencia y Operaciones Especiales Conjuntas de las Fuerzas Armadas, de la Dirección General de Inteligencia, Dircote y la Diviac-PNP buscan a los asesinos, ayer todo fue dolor y desolación en el centro poblado de Huarcatán, en Ayacucho, donde cuatro miembros de una familia fueron secuestrados, torturados y victimados por delincuentes narcoterroristas.

Los deudos de Pedro Ccoriñaupa Arone (70), asesinado junto a sus hijos A. C. A. (16) y R. C. A. (15) y su hijastra Yolanda Canchanya Curo (30) no entienden por qué tanta insania.

VÍCTIMAS

VÍCTIMAS

Unos tenían temor de hablar por posibles represalias, otros protestaban sin lágrimas, solo con esa fuerza que utilizan cada día para perseguir su único objetivo: justicia.

Yolanda era esposa de Gregorio Ccayas Cerena (35), presidente del comité de autodefensa de Huarcatán, ubicado en el distrito de Pucacolpa, provincia de Huanta. Ese día, él también fue secuestrado, pero habría logrado escapar. Para la Policía fue un ataque brutal y ordenado por los Quispe Palomino.

Secuestro y asesinato

Los comuneros recuerdan que el martes 23 de marzo, al promediar a las 12:45 de la tarde, un grupo de al menos 15 o 20 delincuentes terroristas incursionó en el centro poblado.

Con el pueblo a su merced, reunieron a todos los pobladores en la plaza y les arrebataron sus celulares. Les dijeron que “tomarían venganza” contra los miembros del comité de autodefensa porque “eran informantes de la Policía”.

Los trasladaron con dirección al cerro Tambiacocha, donde aniquilaron a Pedro y a su hijo. A las dos mujeres las llevaron a la quebrada Valdivia.

Pedro Yaranga, especialista en temas subversivos, afirma que antes de este crimen múltiple, los narcoterroristas advirtieron que se encontraban tras la familia Ccoriñaupa Curo.

Banda de criminales

El centro poblado Huarcatán se encuentra ubicado en territorio del Vizcatán, que a su vez forma parte del valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem).

En octubre del año pasado, dos miembros del Ejército y un policía murieron en una emboscada perpetrada por terroristas cuando varias patrullas ejecutaban la Operación Ojo de Águila para ‘cazar’ a los hermanos Víctor y Jorge Quispe Palomino, conocidos como los camaradas ‘José’ y ‘Raúl’.

Ambos son cabecillas de la organización criminal autodenominada Militarizado Partido Comunista del Perú (MPCP), que opera en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro.

El objetivo de la Operación Ojo de Águila era penetrar en uno de los principales campamentos donde se encontraban los Quispe Palomino junto con otros dirigentes. Los policías y militares les siguen los pasos.

Patrullas buscan a ʻRichardʼ, ʻFernandoʼ y ʻChato Mendozaʼ

Fuerzas combinadas del Ejército y de la Policía vienen realizando operativos por tierra y aire en busca de los camaradas ‘Richard’, ‘Fernando’ y ‘Chato Mendoza’, quienes dirigieron el secuestro y asesinato. “Los vamos a capturar”, dijo a La República el general Óscar Arriola, jefe de la Dircote.

Los operativos son ejecutados en diversos sectores del Vraem, como Ayahuanco, Pucacolpa, río Mantaro, quebrada Chumaycota y en la zona del Vizcatán.

En la zona operaba Hugo Campos Córdova ‘Julio Chapo’, acusado de asesinar a los esposos Ireneo Camargo y Susana Ponce en el pueblo de San Antonio de Carrizales (Huancavelica).

‘Julio Chapo’, ya detenido, es considerado alto dirigente terrorista y mando militar de los Quispe Palomino.

LR PODCAST: Escucha el Informe Matinal del 29 de marzo del 2021