El volcán Sabancaya de Arequipa cumple cuatro años en proceso eruptivo
El 6 de noviembre del 2016, este macizo expulsó ceniza en columnas eruptivas que tuvieron alturas entre 1.000 y 3,000 metros sobre el cráter. Especialistas esperan la formación de nuevo domo de lava.
El volcán Sabancaya ubicado en el valle del Colca en Arequipa y considerado el segundo más activo del Perú, cumple cuatro años de proceso eruptivo.
Como se recuerda el 6 de noviembre del 2016 a las 20.40 horas, una explosión seguida de emisiones continuas de ceniza, con columnas eruptivas entre 1.000 y 3.000 metros sobre el cráter, marcaron el comienzo de una nueva fase eruptiva de este macizo. Desde esa fecha hasta la actualidad se encuentra en nivel de alerta naranja.
El Instituto Geológico Minero y Metalúrgico (Ingemmet) recordó esta fecha. La entidad informó que, mediante su Observatorio Vulcanológico, realizan el monitoreo permanente del proceso eruptivo.
Los especialistas informaron que la actividad del Sabancaya ha ido variando en estos años. Ha alcanzado hasta 100 explosiones por día en periodos de mayor actividad, mientras que, en las últimas semanas, se vienen reportando entre 30 a 40 explosiones por día.
También se registraron flujos de dióxido de azufre (gas volcánico) de hasta 14.800 toneladas por día en el año 2018, y 10.000 toneladas por día en el 2020.
Esperan nuevo domo de lava
Los investigadores del Observatorio Vulcanológico del Ingemmet (OVI) señalaron también que se espera la formación de un domo de lava en el cráter del Sabancaya luego que en los últimos años se observara la formación y destrucción de un cuerpo similar.
El OVI determinó un posible escenario que implica la formación de un domo acompañado de actividad explosiva moderada (vulcaniana), con emisiones de gases, ceniza y proyectiles balísticos. Además, podrían registrarse pequeños flujos piroclásticos (mezclas muy calientes de gases, bloques y ceniza), que se emplazarían principalmente en los flancos norte, noreste y este.
Por último, agregaron que también se prevé el emplazamiento de lahares (flujos de lodo – huaicos volcánicos) en las principales quebradas y ríos aledaños al Sabancaya, algunos podrían llegar al valle del Colca, durante la temporada de lluvias.