ATU niega que vaya a expropiar terreno de la Universidad Agraria para la Línea 4 del Metro
La casa de estudios advirtió que el uso de sus áreas como patio de máquinas afectaría gravemente a la comunidad universitaria.
La Autoridad de Transporte Urbano (ATU) rechazó que tenga intenciones de apropiarse de una parte del campus de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM) para utilizarla como patio taller de la Línea 4 del Metro de Lima.
Previamente, la casa de estudios emitió un comunicado donde denunciaban que la ATU les envió un documento para informarles que tomarían 21 hectáreas de su terreno para la mencionada obra.
Tanto las autoridades como el alumnado mostraron su negativa ante el proyecto, pues indicaban que en dicha zona se ubicaban áreas empleadas como parte de las actividades académicas. Asimismo, señalaron que el funcionamiento de un patio de máquinas generaría “un impacto significativo e irreversible en el ecosistema de la universidad pública y el sector agrario”.
Como respuesta, la ATU señaló en un nuevo comunicado que en ningún momento manifestó a la institución que expropiarían su terreno o impondrían alguna decisión unilateral.
Confirmaron que es cierto que el proyecto de la Línea 4 del Metro de Lima, el cual se encuentra aprobado a nivel de Perfil desde el 2017, contemplaba la utilización de terrenos de la UNALM. No obstante, la ATU asegura que ahora se buscan otras alternativas.
Afirman que convocaron a una reunión el 5 de agosto con las autoridades universitarias para que estas proporcionen información actualizada sobre los proyectos de infraestructura, instrumentos de planificación y actividades que vienen realizando en este momento.
“Es así que en esta reunión se solicitó que se nos remita formalmente lo antes señalado, a fin de sustentar la evaluación que se tenga que realizar para la viabilidad del proyecto, lo cual incluye otras alternativas”, señalaron.
Desde la ATU aseguraron sentirse extrañados por el comunicado emitido por la universidad e indicaron ser “respetuosos de la autonomía y la transparencia para la buena gestión pública y que cualquier elemento del sistema de transporte que se implemente cuente con legitimidad técnica y social”.
