Gran Orquesta de Domínguez sufre grave accidente
Sociedad

VRAEM: Fuerzas armadas decomisan 13.000 pies de madera a mafias de tala ilegal

El blanqueo de madera mueve unos 112 millones de dólares y por la deforestación clandestina se pierden unas 48.000 hectáreas de bosque.

Decomisan madera ilegal en el Vraem | Créditos: difusión
Decomisan madera ilegal en el Vraem | Créditos: difusión

El negocio de la tala ilegal de madera se traga, lentamente, a los bosques tropicales de nuestra Amazonía. El 60 % de la madera supervisada procedente solo de Loreto y Ucayali tiene origen ilegal. Además, una variedad de permisos de tala se utilizó para blanquear madera, cuyo valor estimado es de 112 millones de dólares.

Cada año en el país, por la deforestación clandestina, se pierden unas 48.000 hectáreas de bosque. Son las apartadas áreas no solo de Loreto y Ucayali, también de Madre de Dios y ahora las del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), donde en muchos sectores solo hay grupos armados, los lugares predilectos para quienes están detrás del negocio, toda una mafia con conexiones en otros países.

Hoy el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas dio a conocer la intervención de 13.300 pies de madera en acciones contra la tala ilegal en el Vraem.

Una de las operaciones se realizó en un sector de la comunidad nativa de Mazoronquiari, en el distrito de Pangoa, provincia de Satipo, región Junín, donde fueron interceptados dos camiones con cerca de 3.000 pies de madera moena y roble aserrado en 135 tablones, y 2.500 de madera roble en 16 troncos.

Vraem

Decomisan madera ilegal en el Vraem | Créditos: difusión

En otro operativo personal de las fuerzas armadas intervinieron un camión transportando 7.800 pies de madera cedro y moena en el sector de la comunidad nativa de Pampa Tigre, también en Pangoa.

Los vehículos intervenidos fueron puestos a disposición del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), mientras que los detenidos quedaron en manos de la Policía.

Pero no en todos los efectivos de la Policía y militares en las carreteras hay expertos ambientales, y los agentes no conocen las dimensiones de la madera transportada, hecho que facilita el accionar delictivo.