Protestaron a favor de las peleas de gallos y la tauromaquia
Manifestantes acudieron al Tribunal Constitucional para exigir que se sigan realizando estas prácticas. Su representante señaló que cerca de 4 millones de personas son aficionadas a las peleas de gallos.
Miles de personas marcharon ayer, jueves 9 de enero, hacia el Tribunal Constitucional para exigir la aprobación de una resolución que permita las peleas de gallos y corridas de toros. El médico veterinario Enrique Tello Corbeto explicó que estas prácticas son una manifestación cultural.
“Nosotros pedimos respeto a nuestras costumbres. No la hemos inventado nosotros, viene desde la época de la colonia, es parte de obras de Ricardo Palma, del Caballero Carmelo”, explicó.
Para él, la Ley 3047, de Protección y Bienestar Animal es inconstitucional. “La nueva presidenta del TC dijo que este tema era sensible. Aquí no se trata de un tema de sentimientos, aquí se trata de un tema de legalidad jurídica”, opinó.
Existen cerca de 4 millones de personas aficionadas a las peleas de gallos, según Tello. Los coliseos donde realizan estos eventos reciben la presencia de miles de personas, hecho que no sucede con ninguna otra actividad. Calculó que las peleas de gallos generan 405 mil puestos de trabajo, entre las personas que entrenan a las aves, quienes los cuidan.
“Los 17 millones de gallos consumen un millón de alimentos a diario y eso sale del campo. La persona que cultiva también se beneficia porque se tarda unos cinco o seis meses para que su hectárea produzca”, añadió en entrevista con RTV.
“Le damos mejores condiciones para que peleen, le damos cariño y todo. Esta gente dice que defiende la vida, pero en el Perú se matan millones de pollitos bebés de unos días de nacidos, solo por el hecho de que nacieron machos. En el Perú se juega al año 4 millones de gallos y no todos mueren, solo la mitad”, comentó.
La gallística, una práctica legal en el Perú
La Unión de Galleros del Perú comunicó que la gallística es una práctica legal porque a estos animales no se les considera en la Ley de Protección y Bienestar Animal, norma que defiende la protección de mascotas.
“La primera disposición complementaria final nos excluye expresamente del ámbito de su aplicación, junto a las corridas y peleas de toros, por nuestra naturaleza cultural”, se lee en el documento.