Sunedu deniega licenciamiento a universidad ligada a Joaquín Ramírez
Proceso. La Universidad Privada Juan Pablo II, ubicada en Ate y con 930 alumnos, deberá cerrar en los próximos dos años por no cumplir con las exigencias. Exsecretario general de Fuerza Popular fue denunciado por su tía por titularidad de casa de estudios.
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Por: Carlos Contreras Chipana
En estos días en los que se encuentra en la mira de la Comisión de Educación del Congreso, presidida por la legisladora fujimorista Tamar Arimborgo, la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) sigue denegando el licenciamiento a más universidades privadas que no cumplen con las exigencias mínimas de calidad.
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A través de dos resoluciones de la Sunedu que se publican hoy en El Peruano, La República pudo conocer que la Universidad Privada Juan Pablo II, ubicada en el distrito de Ate, y la Universidad Privada de la Selva Peruana, con sede en Iquitos, no cumplen las exigencias y deberán cerrar en dos años.
Lo que llama la atención es el licenciamiento denegado a la primera casa de estudios, pues está ligada al exsecretario general del partido político Fuerza Popular, Joaquín Ramírez.
Historia y vínculo
La historia de la Universidad Privada Juan Pablo II, que tiene hoy 930 estudiantes, se remonta al año 2006 cuando se creó la empresa Promotora Juan Pablo II S.A., cuyos accionistas eran Joaquín Ramírez y su tía Nancy Gallegos de Ramírez (esposa del exrector de la Universidad Alas Peruanas, Fidel Ramírez, hoy fallecido), quien era la gerenta general y la accionista mayoritaria.
En el 2010, la Promotora Juan Pablo II S.A. tramitó la creación de la Universidad Juan Pablo II ante el extinto Consejo Nacional para la Autorización y Funcionamiento de Universidades (Conafu) y éste le entregó el visto bueno, por lo que iniciaron funciones en una sede de Surquillo, con un logo y una página web.
Sin embargo, para julio de 2016, la Promotora Juan Pablo II designó a Juan Carlos del Prado, quien fuera abogado de Joaquín Ramírez, como nuevo gerente general. Así, meses después, se creó otra empresa bajo el nombre Universidad Privada Juan Pablo II S.A.C., cuyo gerente general era también del Prado.
Esta nueva empresa usó la autorización que Conafu otorgó a la promotora en el 2010 y pudo iniciar el proceso de licenciamiento, mientras que cambió de sede (a la altura del kilómetro 8.6 de la Carretera Central, en Ate), de logo y de página web.
Conocido ello, empezó un problema interno. La tía de Joaquín Ramírez denunció ante la Fiscalía a su sobrino y a Juan Carlos del Prado por falsificación de documentos, estafa y fraude en administración de personas jurídicas. Además, solicitó a la Sunedu que se deje sin efecto el licenciamiento de la universidad. Este caso sigue pendiente en el 21° Juzgado Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima.
Causas del cierre
Más allá de los problemas legales, la Sunedu comprobó que la Universidad Privada Juan Pablo II no cumplió con ninguna de las condiciones básicas de calidad.
Asimismo, tras el análisis de su sostenibilidad financiera, la Sunedu concluyó que la universidad se encuentra en un escenario de continuas pérdidas y no cuenta con patrimonio como respaldo financiero para su operatividad futura, lo cual no garantiza el mantenimiento de las condiciones básicas de calidad.
"No cuenta con instrumentos de planificación que permitan asegurar el cumplimiento de sus objetivos institucionales. Además, el repositorio de la universidad no contiene toda su producción académica y de investigación", se lee en la resolución.
Tampoco tiene procedimientos ni parámetros para identificar posibles afectaciones a los derechos de autor en su producción académica y de investigación. Asimismo, cuentan con problemas en la selección, renovación y capacitación de docentes y no evidencia la disponibilidad y el adecuado funcionamiento de los servicios sociales, culturales y de vigilancia.
Hasta ayer, esta universidad funcionaba normalmente. Además, a inicios de este mes, tuvo un examen de admisión. Ahora deberá brindar opciones a sus estudiantes.
Ya van 16 universidades denegadas
Con estas dos universidades ya suman 16 casas de estudio que deben cerrar. En tanto, hay 80 que obtuvieron su licenciamiento institucional.
En el caso de la Universidad Privada de la Selva Peruana, esta cuenta con 1.021 estudiantes y su oferta académica está compuesta por cinco carreras de pregrado, que se imparten en tres locales ubicados en Iquitos.
Según Sunedu, una de sus deficiencias era que “evidenciaba inestabilidad en los procesos de planificación”.
