El reto de reconstruir el futuro de los niños huérfanos por feminicidio
Papel del Estado. El Mimp registra 106 “víctimas indirectas” de mujeres asesinadas en lo que va del año, de los cuales 101 son hijos. Defensoría advierte sobre la necesidad de una atención inmediata y la evaluación continua para la recuperación de estos niños.
Por: Melina Ccoillo Sandoval
A su corta edad deben continuar con sus vidas, aún con el dolor de haber perdido a sus madres de una manera violenta. Son las víctimas indirectas, aquellas que, en muchos casos, nadie quiere ver. En lo que va del año, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp) registró 101 huérfanos por feminicidios, de los cuales 98 son menores de edad. ¿Qué está haciendo el Estado por ellos? ¿Qué más se debe hacer para alejarlos de la invisibilidad en la que hasta ahora se encuentran sumergidos?
El pasado 11 de julio, en Puente Piedra, un niño de 11 años se convirtió en una de estas víctimas. Tras regresar de su colegio, abrió la puerta de su hogar y encontró sin vida a su madre, a la pareja de ella y a su hermana menor. El responsable de este feminicidio fue identificado como Rafael Rivera Saldívar (49), quien se suicidó.
La tragedia para el pequeño no terminaba allí, pues debió enfrentar la soledad y el desamparo. Por suerte, hoy se halla con familiares de su madre.
“Es un impacto que va a transformar sus vidas porque se quedan sin sus madres. Necesitan una actitud reforzada por el Estado. Los niños deben continuar con sus proyectos”, dice Matilde Cobeña, Adjunta para la Niñez y la Adolescencia de la Defensoría del Pueblo.
Apoyo del Estado es clave
Los feminicidios en el Perú van en aumento: hoy suman 102. Sin embargo, hasta el año pasado, el Perú no contaba con un registro de niños, niñas y adolescentes que quedaban huérfanos por este delito.
Es a partir de la formación de la estrategia multisectorial “Te acompañamos” del Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Sexual del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp), que funciona desde febrero del 2019, que se tiene estadísticas de estas “víctimas colaterales”.
Este equipo de trabajo se encarga de articular a todos los sectores que tengan que ver con la atención de las víctimas indirectas, ya sea por el lado de salud, la educación y la parte legal, explica Maritza Alarcón, responsable de esta estrategia.
Sin embargo, para la representante de la Defensoría del Pueblo, lo necesario es que se dé un seguimiento a los resultados obtenidos.
“Habría que ver si estos niños terminaron la escuela, porque luego de un tiempo nos podemos encontrar con un niño tímido o que ha naturalizado la violencia. Hay que evaluar también si el programa realmente está funcionando”, señala Cobeña, quien sugiere que esta labor de control debería realizarse a través de reuniones mensuales e iniciar un plan de supervisión anual.
“¿Con quién me quedo?”
El 17 de marzo, Yuri Castillo Cisneros asesinó a balazos a Carmen Julia Osorio Mercado, su conviviente y madre de sus cuatro hijos, tres de ellos menores de edad, quienes quedaron en desamparo. En ese momento, el hijo mayor defendió a su padre. ¿Cómo saber con quién se quedan las víctimas invisibles?
Según explica la especialista del Mimp, la atención a los deudos en los casos de feminicidios es inmediata, y se da a través de los Servicios de Atención Urgente de los Centros de Emergencia Mujer (CEM). Tras ello, la autoridad que interviene para saber con quién se quedan estos niños es la Unidad de Protección Especial (UPE). En las regiones donde no existen, el caso es seguido por los Juzgados de Familia o Fiscalías de Familia.
“Ellos únicamente pueden decidir y deben responder al interés superior del niño. Ha habido casos en que, a veces, se quedan con la familia paterna, y tal vez no sea lo más idóneo”, refiere Alarcón.
Los criterios de evaluación para determinar la patria potestad van desde realizar visitas y pruebas psicológicas a los familiares. “Cuando ya se han agotado todas las opciones, el niño podría ingresar a un Centro de Acogida Residencial (CAR)”, indica la funcionaria del Mimp.
Y es que la recuperación del futuro de un niño huérfano por feminicidio debe ser integral, lo cual, para la Defensoría del Pueblo, debe poner énfasis en el ámbito psicológico y educativo. “En muchos casos estos niños son víctimas indirectas del feminicidio, pero directas de la violencia familiar”, señala Cobeña.
El dato
- Subsidio. Hace un año, el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) anunció que estaban contemplando la posibilidad de otorgar un subsidio a los huérfanos por feminicidio. Hoy, con el cambio de autoridad, la medida no ha vuelto a ser evaluada.