La amenaza del plástico parte IVAlerta. Expertos señalan que hay evidencia científica que indica que componentes de algunos tipos de plásticos pueden producir enfermedades como el cáncer. También refieren que especies marinas pueden morir. Existe microplástico en nuestras costas.,Los plásticos de un solo uso como las bolsas en las que nos entregan una pastilla o en la que nos dan el pollo que compramos en el mercado, las cañitas que colocan en el jugo que tomamos, los vasos de tecnopor en donde nos sirven un café para llevar o los táperes de este mismo material en donde nos entregan una tajada de torta, no solo contaminan nuestro ecosistema. Su utilización también afecta nuestra salud, aseguran los especialistas. "Los alimentos que son contenidos en bolsas y envases plásticos suelen ser contaminados por aditivos tóxicos en pequeñas cantidades que, al consumirlos, podríamos absorberlos en la sangre", asegura el secretario del Colegio Médico del Perú (CMP), médico Juan Astuvilca. PUEDES VER Científico de San Marcos demuestra que muña es eficaz para curar la gastritis Los estudios, añade, han demostrado a largo plazo que algunos componentes de los plásticos como difenoles, cloruro de vinilo y ftalatos, pueden estar relacionados con algunas mutaciones a nivel celular, llegando a comportarse como hormonas en nuestro organismo, provocándonos ciertas enfermedades. "Como cáncer de mama, de cuello uterino, de ovario, leucemia, linfomas y de próstata. También se relaciona con problemas como la infertilidad, el aborto espontáneo; y en el caso de niños, con la hiperactividad, el déficit de atención. Y en las personas mayores, con problemas cardiovasculares y diabetes", precisa el médico. Si bien los estudios no son concluyentes, el CMP sugiere evitar que este tipo de elementos estén en contacto con los alimentos que consumimos debido a los aditivos que poseen, derivados del petróleo. Lo que sí se ha confirmado es que de todos los tipos de plástico, los más tóxicos son los de estructura porosa, como el tecnopor. Los estudios revelan que el estireno, elemento con el cual se elaboran, causa cáncer. En un artículo escrito por el reconocido médico Elmer Huertas en febrero de 2015, se señala que varias investigaciones "demuestran que con el efecto del calor, las grasas o los ácidos de los alimentos, cantidades variables de estireno se sueltan del tecnopor o poliestireno y pasan a la comida o bebida, llegando por tanto a nuestro organismo". ¿Y especies marinas? No solo los humanos estamos propensos a los efectos negativos del desmedido uso de elementos plásticos. Las especies marinas como ballenas, delfines, tortugas, peces, aves y todas aquellas cuyo hábitat sea el mar también se ven perjudicadas. Ellas conviven con los residuos plásticos que dejamos (u ocultamos) en la arena o botamos en la puerta de nuestra casa en una bolsa y que, en vez de ser llevada a un relleno sanitario, terminan en los botaderos y cauce de los ríos. "Las especies marinas, a veces ven estos materiales y los confunden con sus alimentos. Por ejemplo, hay tortugas que se alimentan de medusas u otras especies, que a lo lejos tienen una forma muy similar (a los plásticos). Al verlos, se acercan y los comen produciéndoles la muerte por asfixia", señala el decano nacional del Colegio de Biólogos del Perú, Pedro Carrillo Arteaga. La ingesta de plástico, añade, también les genera trastornos en la alimentación, así como heridas e infecciones, condenándolas a una lenta agonía. De acuerdo con el biólogo, a la fecha no existe un estudio en el país que relacione la muerte de mamíferos, peces, reptiles, aves y otras especies marinas con la presencia de plásticos en el mar de Grau. Microplástico en playas Lo que sí se ha podido confirmar es la presencia de microplástico en las playas de arena de la costa peruana. A lo largo de todo nuestro litoral se han encontrado partículas de entre 2 y 5 milímetros, visibles al ojo humano. "La cantidad de microplástico que se encuentra en Perú está a la mitad de lo que se halla en países de alta contaminación, pero igual es considerable. Hoy se tiene que en cada metro cuadrado de playa existen más de 400 partículas de plástico, mientras que en (los balnearios de) países asiáticos se puede encontrar entre mil y 1 .200 microplásticos por metro cuadrado", explica Sara Purca Cuicapusa, oceanógrafa del Instituto del Mar del Perú (Imarpe) e investigadora del microplástico en el país. Investigaciones internacionales han concluido que la presencia de los plásticos en los océanos es peligrosa ya que debido a factores como el oleaje y la luz solar estos se desintegran en porciones más pequeñas a las que se encuentran en nuestras costas, y son ingeridas por el zooplancton, que alimenta a los peces que luego consumimos los humanos. Purca Cuicapusa asegura que existe bibliografía sobre estudios en laboratorios donde se han expuesto larvas de peces a alimento combinado con partículas de plásticos, sugiriendo que estas larvas pueden ingerir el microplástico. "Al comer el microplástico, estas larvas se sienten saciadas y mueren por inanición. Ellas no pueden reconocer entre las partículas de plástico y las de comida", explica. Estos productos plásticos también suelen quedarse atrapados en el tracto digestivo de las especies, desarrollando tumores. Sin embargo, aún no se sabe si mueren por los tumores o porque tienen un ciclo de vida corto. "Eso todavía está en estudio", precisa. La investigadora señala que posiblemente en octubre, cuando se realicen trabajos especializados en colaboración con el Instituto Marino del Reino Unido, se pueda tener mayores luces respecto a los niveles de toxicidad de ciertas partículas de plástico, así como conocer el impacto de estos en los recursos marinos. Sabía que... Las cañitas tardan hasta 200 años en biodegradarse. Las botellas plásticas más de 500 años. Las bolsas plásticas entre 100 y 400 años para descomponerse. Y los envases de tecnopor más de 500 años. Tenga en cuenta que el tecnopor es un plástico que no se pueden reciclar.
Edición Impresa - La Republica | Lima - Sabado 23 de Noviembre del 2024