Política

¿Cómo afecta que hayamos tenido 6 ministros del Interior en menos de 1 año?

Expertos señalan que Mariano González podría aportar con su experiencia al Mininter, pero llega a una cartera que se ha destacado por una constante inestabilidad política y por su dificultad en cohesionar un equipo de trabajo eficaz.

Mariano González llega al Mininter con buenos pergaminos tras haberse desempeñado como ministro de Defensa de PPK y un amplio recorrido por la gestión pública. Foto: composición de Fabrizio Oviedo/La República
Mariano González llega al Mininter con buenos pergaminos tras haberse desempeñado como ministro de Defensa de PPK y un amplio recorrido por la gestión pública. Foto: composición de Fabrizio Oviedo/La República

Las promesas de campaña del presidente de la República, Pedro Castillo, en torno a la lucha contra la inseguridad ciudadana, muestran un claro contraste con cómo se ha venido trabajando en el Ministerio del Interior, entidad por la que han desfilado seis ministros de Estado en menos de un año de gestión. Expertos coinciden en que es difícil que una entidad pueda articular un plan de trabajo unificado y cohesionar un equipo de profesionales en relación con el Mininter, que permita el retorno de la paz a las calles.

En este sentido, la juramentación —realizada el último lunes 4 de julio— de Mariano González Fernández como nuevo titular del Mininter es, en la práctica, la designación del sexto ministro del Interior durante la era Castillo, la cual recién cumplirá un año de gestión el próximo 28 de julio. Le antecedieron en el cargo Dimitri Senmache, Alfonso Chávarry, Avelino Guillén, Luis Barranzuela y Juan Carrasco.

En diálogo con La República, el analista político Jeffrey Radzinsky advierte que el nombramiento del sexto titular del Mininter nos habla sobre una institución que se encuentra imposibilitada de ejecutar políticas públicas efectivas debido a los cambios constantes: “El sexto ministro del Interior en menos de un año te habla de una inestabilidad política muy grande y te habla también de una incapacidad para designar, para convocar y para elegir un perfil adecuado que pueda cohesionar un equipo y llevar a cabo los planes de seguridad ciudadana, que es de las principales preocupaciones de la ciudadanía”, declaró.

El especialista advierte que, más allá de los cambios de ministros, el Mininter y la Policía Nacional sufren remociones de personal con cada nuevo nombramiento: “Cuando hay cambios de ministros, no solo cambia la cabeza de la institución, habría que fijarnos cuántas veces se ha cambiado al comandante general de la Policía, cuantos viceministros han pasado este año. Tenemos que ver más allá de ese ministro de Estado, sino cómo repercute en otros altos funcionario y en las políticas públicas”, agrega.

Por su parte, el exviceministro de Seguridad Pública Ricardo Valdés comenta —en diálogo con La República— que los constantes cambios en el Ministerio del Interior ponen a la institución en una situación delicada: “No se ha podido implementar una política seria de seguridad ciudadana, tampoco de enfrentamiento de la lucha contra la corrupción y, por otro parte, el crimen organizado está bastante libre”.

Juan Silva, la piedra en el zapato del Mininter

La censura de Dimitri Senmache por parte del Pleno del Congreso de la República, realizada el último jueves 30 de junio, se dio principalmente por la presunta falta de capacidad de gestión que habría llevado a la fuga del exministro de Transportes y Comunicaciones Juan Silva Villegas. La condición de prófugo del extitular del MTC será una constante en las críticas que puedan realizarle al nuevo ministro Mariano González.

“Sin duda, va a ser una constante en las consultas al ministro del Interior, a quien le compete la captura de los prófugos es a la Policía Nacional y, a fin de cuentas, el responsable político de la PNP es el ministro del Interior”, comenta Radzinsky.

Aunque el analista político advierte que la presión contra González Fernández sería menor a la ejercida contra Senmache, debido a que este era visto como responsable de las fugas: “Teóricamente, ya asumió la responsabilidad por las fugas el ministro anterior y el que entra ahora tiene la tarea de capturarlos, pero sin el pasivo de haberse fugado en su gestión”, dijo.000

En tanto, Ricardo Valdés considera que la captura de los prófugos Juan Silva, Bruno Pacheco y Fray Vásquez deberá ser unos de los primeros temas en la agenda para Mariano González: “Como su primer punto en la agenda, él va a tener que conformar un equipo especial para dar con el paradero de los prófugos, eso es lo que demanda el Congreso y la población. (…) Insisto en que debe ser el primer aspecto en abordar y debe ser de inmediato. Y, cuando hablo de un equipo especial, también me refiero al Ministerio Público porque se necesita de un garante porque se ha perdido la confianza en los altos mandos militares”, declara.

Mariano González destacaría en el gabinete Torres

A interpretación de Jeffrey Radzinsky, la presencia de Mariano González en el gabinete Torres sería algo positivo porque se destacaría debido a la experiencia con la que cuenta: “Para el nivel del gabinete que hay y para los constantes cambios que hemos tenido, Mariano González es una figura que está en el tercio superior de este gabinete. Es un político con experiencia, no solo porque fue ministro de Defensa en el Gobierno de Kuczynski y fue parlamentario andino, es alguien que ha estado ligado a la gestión pública, que conoce de derecho”, declara.

Si bien el nuevo titular del Interior es recordado por el apelativo de ‘Ministro del amor’ por renunciar a su cargo de ministro de Defensa, durante el Gobierno de Pedro Pablo Kuczynski, por un escándalo amoroso con una asesora de su cartera, el analista político considera que su formación y experiencia sobrepasan ese sello que ha quedado impregnado en el imaginario colectivo de la población.

En consideración de Ricardo Valdés, Mariano González deberá demostrar en poco tiempo que está a la altura para encaminar al Ministerio del Interior, luego de tantos cambios en menos de un año: “Yo creo que hay que darle un tiempo para ver qué cosa puede hacer, ver si realmente cumple con los principales encargos que tiene. Lo que sí puedo decir es que él no va a desconocer, por experiencia propia, que la videovigilancia implica seguimiento. Él (Mariano González) fue seguido, vigilado y grabado. Creo que eso le podría explicar a Dimitri Senmache, que la videovigilancia implica seguimiento”, finalizó.