Reconocimiento. El sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez Merino y su opción preferencial por los pobres han logrado el respaldo del papa Francisco.,Nicole Winfield. AP El fundador de la Teología de la Liberación, la corriente católica de inspiración latinoamericana que defiende a los pobres, fue recibido como héroe en el Vaticano, en momentos en que el otrora criticado movimiento sigue su rehabilitación bajo el papa Francisco. El sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez fue el orador sorpresa en el lanzamiento de un libro, en el que participaron el cardenal Gerhard Mueller, jefe de la Congregación para la Doctrina de la Fe, entidad encargada de velar porque los sacerdotes no se alejen de las enseñanzas de la Iglesia; el cardenal Óscar Rodríguez, uno de los principales asesores del Papa y portavoz del Vaticano. El ex cardenal Joseph Ratzinger dedicó buena parte de su vida eclesiástica batallando contra la Teología de la Liberación y disciplinando a sus defensores, alegando que habían malinterpretado la preferencia de Jesús por los pobres y la habían convertido en un llamado marxista a la rebelión armada. Esa interpretación fue poderosamente atractiva en las décadas 60 y 70 para muchos que crecieron como católicos, enseñada por maestros influidos por el marxismo e indignados por la desigualdad y la represión a su alrededor. Gutiérrez y quienes lo respaldaban insisten en que la Teología de la Liberación se acopla perfectamente con las enseñanzas de la Iglesia sobre los pobres, que el papa Francisco toma como suya. Francisco escribió en el prefacio del libro de Mueller, "Del lado de los pobres: Teología de la Liberación", en el que Gutiérrez escribió dos capítulos. Gutiérrez, de 85 años, recibió un fuerte aplauso cuando el portavoz del Vaticano anunció su presencia, y otro cuando se acercó al podio para hablar sobre la parábola del Buen Samaritano. El papa Francisco acoge totalmente el llamado jesuita a tener una "opción preferencial por los pobres".