Entrevista, José Carlos Díaz Zanelli @josediazza Para la ex presidenta de la FEPUCP y militante del Partido Socialista , las consignas políticas están por delante de todo. El replanteamiento de la nueva Ley Universitaria , de la Ley del Servicio Civil y de los derechos de las minorías sexuales son algunos de los ideales que agudizan su activismo político. Cree en el Frente Amplio como un generador de cuadros y no descarta una participación electoral luego de terminar su tesis. Movilizaciones tan masivas con jóvenes como protagonistas no ocurren hace varios años, por lo menos desde fines del fujimorismo. ¿Te sientes parte de algo importante? -Más allá de que me sienta parte por haber salido a marchar, siento que los jóvenes compartimos una misma indignación y eso se engancha un poco con un esbozo de querer generar una identidad. Una de las consignas era “Perú, te quiero, por eso te defiendo” y busca que la gente en verdad sienta que está luchando por cambiar algo no solo por indignación sino por querer ver cosas mejores en su país. No es una cuestión solo de odio ¿Estas movilizaciones juveniles sientes que avanzan en sintonía con las que ocurrieron en otro momento en países como México o Chile? -No creo que sea muy comparable. Yo creo que nosotros estamos en un comienzo que podría ser llamado un punto de quiebre. Un contingente no solo joven sino también de clase media se une para movilizarse y manifestar su indignación. Que se enganche todo esto en una marcha como la del 27 convocada con meses de anticipación, por gremios y partidos políticos sí me parece algo que marca la diferencia porque se empieza a ver un proyecto político que no trata solo sobre una ‘repartija’ concreta sino una serie de temas que se empieza a identificar con gente que los tiene muy de cerca. Que el ministro Pedraza y el presidente Ollanta Humala salieran a decir que Movadef se infiltraría en la movilización ¿te parece una manera de desprestigiarla? -Sí. Yo no creo que sea una muy buena intención de parte del Presidente y del Ministro el prevenirnos del Movadef. Ahí se ha tratado de no solo desprestigiar la marcha sino de poner en la mesa que va a haber represión como la ha habido en los últimos días. Primero que el tema del Movadef yo lo he visto como algo sobredimensionado, y segundo que de un contingente de miles de personas que se van a movilidad, una o dos personas que entren y sean del Movadef no van a hacer la diferencia. ¿A qué responde que muchos de los jóvenes que hoy salen a protestar también hayan acompañado a Gana Perú en la segunda vuelta electoral? ¿En qué momento se volvieron oposición? -Así, yo fui una de ellas. Yo soy militante del Partido Socialista que con Javier Diez Canseco acompañó a Gana Perú. Pero la campaña fue por una propuesta elaborada por un equipo de intelectuales que nos representaba y esto se cortó en pleno gobierno. No es responsabilidad de nosotros al decir que “bueno, ellos apoyaron a alguien y ahora se quejan”. Es un deber fiscalizar que las cosas que apoyaste se den porque pueden no dar y cruzar los brazos no soluciona nada. No parece hoy Ollanta Humala el mismo que ganó la presidencia el 2011… -Quizá lo es, solo que no acogió la propuesta. Quizá siempre fue así. Más de un dirigente del Frente Amplio que también integras ha expresado que se siente traicionado por el presidente Humala, ¿tú también? -Sí. Yo siento hubo una traición a los principios y los puntos programáticos que impulsaron este gobierno. Y ´por eso es que los militantes de izquierda crean este Frente Amplio para tratar esas propuestas que fueron dejadas de lado. Esto no nos lleva a una resignación. ¿Consideras pernicioso politizar las movilizaciones? Porque el 22 de julio vi que fueron retirados algunos simpatizantes del Apra pero no por ejemplo a los de Fuerza Ciudadana. -Bueno el Apra formó parte en otro momento de una repartija que algunos compañeros no olvidan. Pero las calles son de todos. Yo lo que veo es cómo hacer el deslinde no solo por la palabra ‘politización’ sino que ninguno de los partidos es decir fuerza Ciudadana y Tierra y Libertad han tratado de arrogarse una representación que no tienen. No te hablo como representante de todo el movimiento sino como una ciudadana más que en las marchas estuvo indignada por los mismos temas. Y hay partido que sí han intentado arrogarse los movimientos, que han dicho “hemos representado” y las marchas han sido espontáneas y han contado con muchos jóvenes independientes. Eso no es lo saludable. El espacio #TomaLaCalle ya se ha deslindado de los partidos que consideramos no se condicen con las causas como el fujimorismo, Perú Posible, el PPC, etc. Regresando a lo de la movilización juvenil. Los jóvenes son muchos y se convocan con bastante celeridad, ¿crees que hace falta que se encausen las movilizaciones? -Creo que esto tiene que pasar de ser algo espontáneo a ser algo más movilizado, pero sobre todo algo más constante. No digo que metamos a las personas en los partidos políticos, yo creo en ellos pero también soy consciente de que están muy desacreditados. Existen los partidos, las asociaciones civiles pero también espacios como #TomaLaCalle que es muy heterogéneo. Yo diría que lo que no se debe perder es la organización, no podemos quejarnos en decir que no hay personas que no representen y esperar que un día aparezcan de la nada. ¿En todo caso coincides en que esta heterogeneidad tiene como común denominador el hartazgo de la clase política? -Sí, claro. El común denominador es la falta de representación de la clase política. Lo que ha sucedido es que la gente se ha dado cuenta, a partir del tema de la ‘repartija’, que mientras no se movilicen, no se quejen o no estén al tanto de lo que sucede, los políticos van a seguir haciendo lo que hacen. ¿Y para los jóvenes como tú que sí tienen filiación política y están en la izquierda, existe algún líder? -Existen dentro del Frente Amplio varias figuras por un tema mediático. Pero yo veo nuevas caras que yo mencionaría a las congresistas del Frente Amplio que siempre fueron consecuentes, está Verónika Mendoza que se perfila como una muy buena líder y a quien creo que muchos apoyamos. Está Marisa Glave en Tierra y Libertad. En el Partido Socialista está Abraham Valencia y en patria Roja está Arturo Ayala, etc. Nombres hay muchos el tema es cómo nos construimos desde la unidad. ¿Y de cara a las aspiraciones electorales que va a tener el Frente Amplio no crees que deban construir un liderazgo que tenga algún arraigo electoral? -Creo que debemos, no para los próximos años, construir los liderazgos. Yo veo mucho entusiasmo de cambio de ideas y de propuestas que son a largo plazo. El Frente Amplio debe ser un generador de cuadros. ¿Crees que con una mayor presencia de la izquierda en el Gobierno se hubieran evitado actos como la ‘repartija’? -Yo creo que sí. La oposición fortalece la democracia y me gustaría ver una derecha responsable así como una mayor presencia de la izquierda, porque la minoritaria bancada que tenemos del frente Amplio es mal que bien lo poco que se tiene luego de lo que algunos llamaran el viraje o este desencanto con el plan de la Gran Transformación. ¿A ti te gustaría ser una líder electoral para la izquierda en algunos años? -Bueno, a mí me gustaría aportar con lo que pueda aportar. Ahorita tengo centrado que debe terminar mi tesis y la universidad en diciembre. En un par de revistas pusieron que quería ser regidora en noviembre y eso está descartado, porque quiero terminar la universidad primero. Yo entré a la militancia por un tema de convicciones. Pero si de ahí hay algún espacio para aportar y es en el campo electoral pues esa posibilidad no está cerrada.