Comparó la gestión de Ollanta Humala con la de los expresidentes Alan García y Alejandro Toledo en relación a los objetivos de largo plazo.Opinión, "Este gobierno, muy rápidamente se está pareciendo cada vez más al gobierno de Alan y de Toledo , pues no tiene grandes metas reformistas y parece prácticamente enfocado en la sobrevivencia, en pasar la semana". Así lo consideró el analista político Martín Tanaka al comentar la forma en como la actual administración viene desenvolviéndose a seis meses de haber tomado la batuta del país. El investigador del Instituto de Estudios Peruanos lamentó que el presidente Ollanta Humala parezca no tener clara una hoja de ruta o visión de país. "Humala ha perdido la visión de país. Los ministros le siguen según sus competencia en el sector, pero ninguno de ellos tiene idea de cuánto tiempo va a quedarse en el cargo, por eso sus metas son de corto plazo. Quizás algunos planifican solo hasta julio que haya cambios", refirió Tanaka en diálogo con ATV+. Según consideró el sociólogo, cambios como por ejemplo el de Ana Jara en reemplazo de Aída García Naranjo en el Ministerio de la Mujer, indican que no existe una coherencia en lo que se propone: "Cambiaron ministra de la Mujer y parece que fuera otra ministra de un gobierno diferente", señaló al referirse a las diferencias entre Jara y la ahora embajadora García Naranjo. Otra cosa que resaltó el autor de "Los espejismos de la democracia", fue el poco respaldo que parecen tener los miembros del gabinete de Ollanta Humala. Según manifesta, "ninguno de ellos sabe bien hasta cuándo estará en el cargo": "Más que coordinar, los ministros parecen evitar confrontarse dentro del gabinete. Siento que no tienen el respaldo suficiente para plantearse varias cosas (...) contar con horizontes temporales tan cortos, no permite plantear iniciativas de largo aliento, más ambiciosas. Estoy tratando de hacer lo que me funcione entre febrero y julio, ya más allá quién sabe", analizó Tanaka. CASO CHEHADE Finalmente, el analista político dijo que a su modo de ver las cosas, el fin del "affair" Chehade, demuestra que el gobierno no quiso alargar más el tema, pues era consciente de que le traería consecuencias: "Uno compara por ejemplo con el caso Del Castillo y recién se ha cerrado ahora. Fue un tema que estuvo siempre en la discusión política. Ellos han intentado evitar que cada cierto tiempo haya noticias sobre él y entonfces decidieron matarlo en el Congreso, y que no pase al Poder Judicial", consideró. No obstante, destacó que tras este tema, "no será creíble levantar la bandera de la lucha contra la corrupción" como se hizo durante la campaña.