Investigan a Bolsonaro por pasar 2 noches en la Embajada de Hungría tras acusaciones por golpe de Estado
El exmandatario de Brasil es un conocido aliado de Viktor Orbán, el primer ministro húngaro de tendencia ultraderechista, con quien ha compartido mutuas expresiones de admiración públicamente en el pasado.
El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro se encuentra en el centro de una controversia reciente. Según un reporte del diario estadounidense The New York Times, se reveló mediante imágenes capturadas por cámaras de vigilancia de la delegación de Hungría en Brasilia que el exmandatario estuvo presente en sus instalaciones del 12 al 14 de febrero, justo después de que se le retirara su pasaporte por orden judicial.
El informe indica que Bolsonaro visitó la embajada apenas cuatro días después de que la Policía Federal iniciara acciones contra él y su círculo cercano por supuestamente planear un golpe de Estado contra el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
El exmandatario de extrema derecha se enfrenta a acusaciones de conspiración para subvertir los resultados electorales que proclamaron vencedor al actual presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. Esta conclusión se ve apoyada por declaraciones de altos oficiales de la Policía y el Ejército.
Bolsonaro podría eludir la persecución penal si se refugia dentro de una embajada extranjera. Ya se ha detenido a dos personas muy cercanas al expresidente por parte de las autoridades brasileñas.
En Brasilia, la justicia exige explicaciones debido al riesgo de que pueda darse a la fuga. Foto: AFP
El abogado de Bolsonaro señaló que fue una "invitación" por parte del personal húngaro
Ante las acusaciones de que el ex jefe de Estado podría estar buscando evadir la ley, su representante legal, Fabio Wajngarten, defendió a Bolsonaro explicando que su visita a la embajada fue el resultado de una "invitación" por parte del personal húngaro. El propósito de esta estancia, según Wajngarten, fue para "establecer contactos con oficiales del país anfitrión" y "estar al tanto del escenario político actual de ambas naciones".
Wajngarten argumentó que cualquier interpretación adicional a esta explicación es puramente especulativa y no se basa en los hechos, lo que califica como una pieza más de desinformación. Esta aclaración fue compartida por el abogado a través de sus canales en redes sociales, donde enfatizó la transparencia de las acciones de Bolsonaro.
La relación entre Jair Bolsonaro y Viktor Orbán
La conexión entre Jair Bolsonaro y el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ambos líderes con inclinaciones ultraderechistas, podría ser una razón adicional para la "visita" sorpresiva de Bolsonaro. La relación entre los dos ha sido descrita como una "amistad" significativa, forjada durante el periodo en que ambos estaban al frente de sus países.
Esta cercanía se vio reflejada en una declaración de Bolsonaro, quien llamó a Orbán "su hermano" en un encuentro oficial en Hungría en 2022. Esto evidenció el estrecho vínculo entre ambos líderes.
"Es ampliamente reconocido que el exmandatario goza de una relación estrecha con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, con quien tuvo un encuentro reciente durante la ceremonia de investidura del presidente argentino, Javier Milei, en Buenos Aires", indicaron los redactores de la noticia.
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En Brasilia piden descargos de la Embajada de Hungría
Después de que se divulgara la noticia, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil convocó a Miklós Halmai, el principal representante diplomático de Hungría en territorio brasileño, para aclarar las circunstancias que llevaron a Bolsonaro a permanecer más de 24 horas dentro de la embajada.
Halmai fue atendido por María Luisa Escorel, secretaria de Europa y América del Norte del ministerio, aunque no se proporcionaron detalles sobre lo discutido en la reunión.
Desde su salida de la presidencia en 2022, Bolsonaro ha estado rodeado de controversias legales. Además de enfrentar acusaciones relacionadas con un supuesto intento de golpe de Estado, una corte brasileña lo inhabilitó políticamente hasta 2030 por difundir desinformación electoral en el proceso de elecciones que lo vio perder frente a Lula.
Asimismo, el 19 de marzo, la Policía Federal lo acusó de falsificar certificados de vacunación contra la COVID-19, lo cual podría constituir un delito, según la legislación brasileña.
