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Guatemala detiene y reprime con violencia a caravana migrante hondureña

Los migrantes han sido atacados a palos y con bombas lacrimógenas por miembros del Ejército de Guatemala.

“Sólo déjennos pasar por su país, es lo único”, le contestó un migrante al Director General de Migración de Guatemala, Guillermo Díaz. Foto: EFE
“Sólo déjennos pasar por su país, es lo único”, le contestó un migrante al Director General de Migración de Guatemala, Guillermo Díaz. Foto: EFE

Las fuerzas de seguridad de Guatemala detuvieron y reprendieron violentamente este domingo a una caravana migrante compuesta por miles de hondureños, que pretenden llegar a México y posteriormente a Estados Unidos en busca del sueño americano.

Los migrantes han sido atacados a palos y con bombas lacrimógenas por miembros del Ejército de Guatemala cuando intentaron avanzar en una carretera al oeste del país, donde permanecen varados desde la noche del sábado 16 de enero, informa Efe.

Este nuevo éxodo masivo de personas migrantes de Honduras busca huir de la violencia, el hambre, la miseria, los desastres naturales y la desigualdad que sufre este país centroamericano.

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La situación no ha cambiado respecto al 2018 cuando más de 7.000 personas conformaron la primera Caravana Migrante en dirección a EE. UU. buscando el sueño de mejorar sus vidas.

Ni el coronavirus, ni la masiva presencia policial y militar, ni las advertencias de Estados Unidos sobre sus fronteras “vigiladas” han logrado evitar que 9.000 personas salieran caminando el 15 de enero en distintos grupos desde la estación de buses de San Pedro Sula hacia la frontera con Guatemala.

El jueves 14 de enero, el gobierno de Guatemala decretó el Estado de Prevención en siete departamentos con alrededor de 20 puntos de control migratorio y cientos de agentes policiales y soldados, informa El Mundo.

Sin embargo, la necesidad de salir de la pobreza en la que muchas personas cayeron tras las tormentas tropicales de ETA e IOTA del 2020 ha sido más fuerte que cualquier retén.

Militares con palos trataban de impedir en una carretera de Vado Hondo, en Guatemala, que un grupo de 3.500 migrantes siguiera su camino hacia Tecún Umán, en la frontera con México. Pero muchos de ellos comenzaron a correr y rebasaron el control militar.

El Instituto Guatemalteco de Migración informó que las fuerzas de seguridad detuvieron nuevamente el flujo migratorio, con el fin de solicitar a los miles migrantes los requisitos para transitar legalmente por el país: documento de identidad o pasaporte y una prueba PCR negativa de coronavirus.

El Director General de Migración, Guillermo Díaz, se acercó a los migrantes, acompañado de agentes de la Policía, para advertirles de que “es imposible que puedan continuar su ruta. Ya pudieron probar y no fue posible pasas y quienes lo lograron, ya fueron detenidos allá adelante. Los invitamos a que regresen a su lugar de origen”, sostuvo.

Solo déjennos pasar por su país, es lo único”, le contestó un migrante. “Nos estamos muriendo de hambre”, contestó otro, mientras un agente de Policía les invitaba a “colaborar” y a apartarse hacia un lado de la carretera para dejar libre la circulación de vehículos.

Con información de EFE

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