Laboratorio chino niega ser responsable de la pandemia de la COVID-19
El director del laboratorio P4, en Wuhan, acusado de originar la propagación del virus, aseguró que es “imposible” que esto haya pasado. Dijo también que ninguno de sus empleados ha sido contagiado.
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El laboratorio de Wuhan (China), culpado por medios de comunicación estadounidenses de ser la fuente del nuevo coronavirus, ha desmentido categóricamente el sábado 18 las acusaciones. En tanto, el Gobierno de Donald Trump ha iniciado una investigación para determinar el origen del virus.
Desde ya, China está sometida a una creciente presión sobre la forma en la que gestionó la pandemia. Estados Unidos busca por su parte averiguar si el SARS-CoV-2 fue producto de un error o de algo intencionado.
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Al respecto del debate sobre el origen de la COVID-19, científicos chinos han afirmado que el virus probablemente saltó de un animal a los humanos en un mercado en Wuhan. Sin embargo, algunas teorías conspirativas aseguran que el inicio fue en realidad en el Instituto de Virología, concretamente en el laboratorio P4, equipado para manejar virus peligrosos.
El instituto ya rechazó estas teorías en febrero y dijo que había compartido información sobre el patógeno con la Organización Mundial de la Salud (OMS) a principios de enero.
Pero esta semana en Estados Unidos han resurgido los rumores. El secretario de Estado, Mike Pompeo, afirmó que funcionarios estadounidenses realizan una “investigación completa” sobre cómo el virus “salió al mundo”.
En ese sentido, Yuan Zhiming, director del laboratorio de Wuhan aseguró que “es imposible que este virus venga de nosotros”. “Ninguno de los empleados ha sido infectado”, afirmó al canal CGTN.
“Sabemos claramente qué tipo de investigación se lleva a cabo en el instituto y cómo gestiona virus y muestras”, agregó Yuan.
Como el laboratorio P4 está en Wuhan “la gente no puede evitar hacer asociaciones”, lamentó, y acusó a algunos medios de comunicación de “intentar deliberadamente engañar a la gente” con informaciones “totalmente basadas en especulaciones” sin “pruebas”.
Las acusaciones
Según el Washington Post, la embajada de Estados Unidos en Pekín, después de varias visitas al instituto, alertó en 2018 a las autoridades estadounidenses de medidas de seguridad aparentemente insuficientes en un laboratorio que estudiaba coronavirus procedentes de murciélagos.
Las autoridades de Wuhan trataron inicialmente de encubrir el brote y hay interrogantes sobre el recuento oficial de infecciones porque el Gobierno ha cambiado varias veces el sistema de cómputo.
Esta semana las autoridades de la ciudad admitieron errores en el recuento de muertos y aumentaron la cifra un 50%.
Con información de AFP.
