Retiran 700 cadáveres de viviendas de Guayaquil, la “lamentable excepción” en Ecuador
Ecuador realiza arduas labores para intentar levantar todos los cuerpos que yacen olivados en Guayaquil, epicentro de la COVID-19 en el país.
El nuevo coronavirus desató una crisis en los sistemas sanitario y funerario de la ciudad de Guayaquil, la “lamentable excepción” en Ecuador, como la catalogó el propio Gobierno, a tal nivel que los cadáveres permanecieron horas en sus casas.
Y este domingo el Ejecutivo de Ecuador informó que logró retirar al menos 700 cuerpos de personas que fallecieron en las últimas semanas en sus casas en la capital de la provincia de Guayas.
“La cantidad que nosotros hemos recogido, con la fuerza de tarea en viviendas, superó las 700 personas” fallecidas, dijo Jorge Wated, quien lidera un equipo de policías y militares creado por el Ejecutivo ante el caos desatado en Guayaquil por la COVID-19, que ralentizó el traslado de cuerpos.
Wated no precisó las causas de esas muertes ocurridas durante la emergencia sanitaria por la pandemia, que en Ecuador deja 7.500 casos, incluidos 333 fallecidos, desde que fuera declarada la presencia del virus el 29 de febrero.
La provincia costera de Guayas concentra un 72% de los infectados. Y en su capital, Guayaquil, hay alrededor de 4.000 enfermos, de acuerdo con el Gobierno nacional.
La fuerza de militares y policías empezó hace tres semanas a retirar cadáveres de casas tras fallas en el “sistema mortuorio” del puerto guayaquileño, que provocaron demoras en el servicio forense y las funerarias en medio del toque de queda de 15 horas diarias que rige en el país.
Ante la situación, los guayaquileños difundieron por redes sociales videos de cuerpos abandonados en las calles y mensajes de auxilio de familiares para enterrar a sus muertos.
El Ejecutivo ecuatoriano también asumió la tarea de sepultar cuerpos ante la imposibilidad de sus familiares de hacerlo por diversos motivos, entre ellos económicos.
Desde Guayaquil, en una rueda de prensa virtual, Wated señaló que los restos de 600 personas plenamente identificadas han sido sepultados en dos cementerios de la ciudad.
Hace casi dos semanas, Wated anticipó que “los expertos médicos lamentablemente (...) estiman que los fallecidos en estos meses llegarán a entre 2.500 a 3.500 por COVID-19, solo en la provincia de Guayas”.
El caso de Guayaquil
El vicepresidente de Ecuador, Otto Sonnenholzner, consideró lo acontecido en Guayaquil “una lamentable excepción” de lo que ocurre en el país, donde asegura que en la gran mayoría de ciudades, ahora salen de las urgencias más pacientes de los que ingresan.
Lo que ocurrió, explicó en entrevista con la agencia EFE, es que Guayaquil fue “una lamentable excepción”, porque “con las mismas medidas (aplicadas en todo el país) tuvimos resultados diferentes”.
“Fue muy doloroso, sobre todo cuando tuvimos la mayor complicación”, afirmó al recordar que llegó a pedir disculpas a la ciudadanía, en cadena nacional, por la crisis de los cadáveres.
Con información de AFP y EFE