Una offshore, por favor
“Mossack y Fonseca crearon un estudio de abogados como una suerte de McDonald’s que, en lugar de vender hamburguesas, ofrecía empresas ‘offshore’”.
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Jürgen Mossack y Ramón Fonseca, los propietarios del bufete de abogados que alcanzó celebridad con el escándalo mundial conocido como Los Papeles de Panamá, interpusieron una demanda por presunta difamación contra Netflix en un intento por bloquear el estreno de la película La Lavandería, que relata la historia de esta pareja de letrados que a sola firma constituyó millares de empresas “offshore” por todo el planeta para ocultar dinero de origen sospechoso, si no mal habido.
El director de la cinta, Steven Soderberg, narra la historia de Mossack y Fonseca sobre un guion basado en el libro Secrecy World (2018), de Jake Bernstein, uno de los reporteros principales del equipo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) que destapó Los Papeles de Panamá, organización que recibió el premio Pulitzer por dicho excepcional trabajo. El caso se sustentó en documentos filtrados del propio estudio de abogados, que dejaron en evidencia potenciales actos de corrupción que son materia de indagación por parte del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), paso previo para someter a juicio al alemán Mossack y al panameño Fonseca.
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Por eso resulta risible que la demanda de los letrados sugiere que la película es “publicidad falsa” que afecta la reputación de Mossack y Fonseca, que resulta en los hechos una “invasión de la privacidad” de los abogados y una “violación de la marca” del estudio. Los letrados también afirman que el largometraje los daña porque son presentados como sujetos “despiadados e indiferentes” y relacionados con conductas criminales. Cuando lo cierto es que, como dice Jack Bernstein en su extraordinario libro, “Mossack y Fonseca crearon un estudio de abogados como una suerte de McDonald’s que, en lugar de vender hamburguesas, ofrecía masivamente empresas ‘offshore’ a bajo costo a cualquier compañía que se las pidiera, logrando constituir más de 200 mil en todo el mundo”.
Es muy probable que el FBI denuncie a Mossack y Fonseca antes que estos abogados consigan suprimir la emisión de La Lavandería, que revela que las “offshore” es un esquema que no solo beneficia a dictadores, corruptos, traficantes de armas o narcotraficantes, como indica Bernstein, sino especialmente a las empresas más poderosas y más ricas. Ese es también el punto.
















