Los pulpos Iniesta e Iker predijeron los resultados del clásico de mañana . Estos cefalópodos del acuario Sea Life de Benalmádena (Málaga) fueron escogidos a falta de pulpo Paul. Iker presagió un empate entre el Real Madrid y el Barcelona. El más pequeño de ambos, Iniesta, con apenas kilo y medio de peso se comió la sardina introducida en el tubo con el escudo del equipo merengue, desechando la del tubo con el del Barcelona. Iker por su parte, un pulpo gigante del Pacífico de más de dos metros y dieciséis kilos de peso, no ha querido ninguna de las sardinas, por lo que su predicción es un empate. El super clásico será la oportunidad de uno de estos dos pulpos de heredar la corona de Paul , que acertó todas sus predicciones en el Mundial de Sudáfrica el año pasado y que se consolidó como ídolo entre los ciudadanos españoles al dar por ganador del mundial a España.