Ciencia

Astrónomos hallan al agujero negro que crece más rápido: se devora a un sol entero cada día

De acuerdo con el descubrimiento astronómico, existe un agujero negro supermasivo que supera todos los récords. Actualmente, tiene una masa que equivale a 17 millones de soles. 

El cuásar más brillante del universo: un gigante cósmico devorador de estrellas. Foto: IA / LR
El cuásar más brillante del universo: un gigante cósmico devorador de estrellas. Foto: IA / LR

En un hito sin precedentes para la astronomía, investigadores han identificado un agujero negro supermasivo cuya rapidez para crecer desafía todo lo conocido hasta ahora. Este coloso cósmico, situado en el corazón de un cuásar extraordinariamente luminoso, devora material equivalente a más de la masa de un sol cada día, lo que es un nuevo récord en el universo observable. Este hallazgo no solo arroja luz sobre la naturaleza de los agujeros negros y los cuásares, sino que también marca un punto de inflexión en nuestra comprensión de la dinámica cósmica.

Con el Observatorio Europeo Austral (ESO) y el Telescopio Muy Grande (VLT, por sus siglas en inglés), el equipo de astrónomos logró medir con precisión la tasa de crecimiento y la luminosidad de este fenómeno. Se estima que la luz del quásar ha tardado en llegar 12.000 millones de años, por lo que ofrece una ventana única al universo primitivo.

¿Cómo es el agujero negro encontrado?

"Hemos descubierto el agujero negro de más rápido crecimiento conocido hasta la fecha", afirmó Christian Wolf, autor principal del estudio en Nature Astronomy que dio a conocer el hallazgo, para un comunicado difundido por ESO.

El agujero negro supermasivo, ubicado en el núcleo del cuásar J0529-4351, redefine lo que se conoce sobre la capacidad de crecimiento de estos objetos celestes. Con una masa estimada entre 17.000 y 19.000 millones de veces la del Sol, su apetito insaciable se traduce en la acumulación de más de 370 masas solares anualmente.

El cuásar es alimentado por el agujero negro y este, al consumir el material circundante, libera las enormes cantidades de energía en forma de luz y otras radiaciones, lo que convierte a J0529-4351 en el objeto más luminoso del universo.

El cuásar es impulsado por el agujero negro supermasivo. Foto: ESO / M. Kornmesser

El cuásar es impulsado por el agujero negro supermasivo. Foto: ESO / M. Kornmesser

¿Cómo fue posible el hallazgo?

El descubrimiento del agujero negro supermasivo fue posible gracias a la avanzada tecnología del Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo Austral (ESO). Aquello permitió a los astrónomos detectar y analizar la increíble luminosidad y tasa de crecimiento del cuásar J0529-4351.

Este hito se logró mediante el uso de espectroscopia de alta precisión que reveló la masa y la velocidad de acreción del agujero negro en su núcleo. De este modo, destaca la importancia de la innovación tecnológica en la astronomía moderna.

 El VLT se encuentra en el Observatorio Paranal de ESO, junto con su telescopio de rastreo, entre otros telescopios. Foto: ESO

El VLT se encuentra en el Observatorio Paranal de ESO, junto con su telescopio de rastreo, entre otros telescopios. Foto: ESO

¿Por qué este descubrimiento es importante?

La importancia de este hallazgo radica en su capacidad para desafiar y enriquecer la comprensión del universo temprano. Al estudiar objetos como J0529-4351, los científicos pueden obtener información crucial sobre la formación y evolución de los agujeros negros supermasivos, así como sobre las condiciones del cosmos en sus primeras etapas.

Asimismo, este descubrimiento amplía la comprensión del universo, revela la dinámica extrema que puede existir en galaxias lejanas y nos ayuda a situar nuestro propio lugar en el cosmos

¿El agujero negro podría devorar al Sol de la Tierra?

De acuerdo con la literatura teórica, si el Sol terrestre estuviera lo suficientemente cerca de un agujero negro supermasivo como el descubierto, podría ser devorado, producto de la intensa gravedad. Sin embargo, nuestro Sol y el sistema solar están situados a una gran distancia de cualquier agujero negro conocido hasta la actualidad, por ello, están a salvo.