COVID-19: así es el ‘manual chino’ para controlar el nuevo repunte de contagios
Mientras las autoridades de algunos países del mundo debaten sobre si debemos seguir usando mascarillas, la situación sanitaria en China atraviesa un retroceso.
Pese a las estrategias impuestas, China se ha visto perjudicada por una nueva ola de coronavirus que se ha propagado más rápido que las anteriores por estar relacionada a la variante ómicron. El linaje de preocupación es tan infeccioso que ni siquiera la medida llamada ‘COVID cero’ consiguió contenerlo. Dicha campaña de salud se basa en cerrar las fronteras y confinar ciudades enteras desde que brota el primer caso, así como implementar una vacunación agresiva.
Este jueves 17 de marzo, de acuerdo con la cadena estatal CCTV, el presidente del gigante asiático, Xi Jinping, se mostró firme en mantener esa política contra la pandemia por estar atravesando el peor repunte a partir del 2020. “Debemos continuar poniendo a la gente y la vida por delante”, declaró el dignatario. Sin embargo, ¿cuáles son las novedades en su ‘manual’ para atajar la propagación de un virus que se resiste a dar tregua?
Por primera vez, la Comisión Nacional de Salud ha dado el visto bueno para realizar pruebas masivas de antígenos, normalmente empleadas en Occidente; con ello, las autoridades dan a entender que estas reemplazarán, en su mayoría, a los descartes de ácido nucleico.
En segundo lugar, pacientes con COVID-19 que tengan síntomas leves podrán ir a un centro de cuarentena en vez de dirigirse a un hospital, situación que muchas veces satura el sistema sanitario. De esa manera, se liberarán camas para quienes verdaderamente necesiten una atención urgente.
Un sistema de recompensas, por otro lado, empezará a funcionar. Quienes incumplan la cuarentena serán reportados vía telefónica a las autoridades. Las personas que detecten a los infractores recibirán 1.400 euros (5.797 convertidos a moneda peruana).
¿De nunca acabar? China sufre su peor ola desde que la pandemia empezó en el 2020. Foto: AFP
Según la agencia AFP, debido al aumento de contagios, “las autoridades decretaron confinamientos en al menos 17 ciudades, sobre todo en la provincia de Jilin (noreste), donde se detectó gran parte de los casos, y en la ciudad de Shenzhen (sur), donde viven 17,5 millones de habitantes”.
Solo en marzo han surgido alrededor de 18.000 nuevos positivos de coronavirus en 28 provincias chinas. Este miércoles 16 de marzo se registraron 5.000 contagios en 24 horas.
Si una ciudad está completamente bloqueada significa que los habitantes no pueden salir de su vecindad, excepto trabajadores esenciales y quienes se dediquen a servicios de emergencias.
Además, los integrantes de un hogar solo tienen el permiso de enviar a una persona de compras cada tres días.
Zeng Guang, epidemiólogo que es jefe y supervisor de doctorado en el Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades, recomendó a inicios de marzo que lo mejor es “vivir” con el virus y abandonar en un futuro la estrategia ‘COVID cero’.
Sus fundamentos son que pocos compatriotas se han contagiado y la inmunidad colectiva proviene de la vacunación con fórmulas nacionales.