Ciencia

NASA halla evidencias de masivas erupciones volcánicas en Marte

El fenómeno se produjo en una zona denominada Arabia Terra hace 4.000 millones de años. En un inicio el grupo de científicos creyó que se trataba de huellas del impacto de asteroides.

Las explosiones volcánicas habrían lanzando vapor de agua, dióxido de carbono y dióxido de azufre al aire marciano. Foto: NASA/JPL-CALTECH/UNIVERSITY OF ARIZONA
Las explosiones volcánicas habrían lanzando vapor de agua, dióxido de carbono y dióxido de azufre al aire marciano. Foto: NASA/JPL-CALTECH/UNIVERSITY OF ARIZONA

Un grupo de científicos de la NASA encontró recientemente evidencia de gigantescas erupciones volcánicas en la superficie de Marte. El fenómeno se habría prolongado por aproximadamente 500 millones de años en Arabia Terra, una región ubicada en la parte norte del planeta rojo.

El artículo publicado en la revista científica Geophysical Research Letters sugiere que la ceniza volcánica observada en Arabia Terra es el resultado de entre 1.000 y 2.000 erupciones hace 4.000 millones de años. La afirmación parte del estudio realizado por los investigadores de la topografía y la composición mineral de la zona.

Las explosiones volcánicas habrían lanzando vapor de agua, dióxido de carbono y dióxido de azufre al aire marciano. “Cada una de estas erupciones habría tenido un impacto climático significativo; tal vez el gas liberado hizo que la atmósfera se volviera más gruesa o bloqueara el Sol y enfriara la atmósfera”, señaló Patrick Whelley, geólogo del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA. “Los modeladores del clima marciano tendrán que trabajar un poco para tratar de comprender el impacto de los volcanes”, agregó.

El estudio de la región boreal de Marte inició en 2013 cuando los científicos descubrieron siete depresiones en la zona. Al principio creyeron que se trataba de huellas del impacto de asteroides, hace millones de años. Sin embargo, la tesis del estudio planteó que se trataban de calderas dejadas por el colapso de algunos volcanes.

Las calderas, que también existen en la Tierra, son agujeros de decenas de millas de diámetro que se forman cuando se destruye un volcán.

“Estábamos interesados en hacer un seguimiento, pero en lugar de buscar los volcanes en sí mismos, buscamos la ceniza, porque no se puede ocultar esa evidencia”, declaró Whelley.

¿Cuál fue el método de estudio?

La identificación de los minerales volcánicos fue posible gracias a las imágenes del espectrómetro del Orbitador de reconocimiento de Marte (MRO, por sus siglas en inglés). El equipo observó las paredes de los cañones y cráteres de cientos a miles de millas de las calderas, donde la ceniza habría sido transportada por el viento. En estas superficies encontraron restos volcánicos convertidos en arcilla por el agua, incluyendo montmorillonita, imogolita y alofano. Luego, utilizando imágenes de las cámaras MRO, el equipo elaboró mapas topográficos tridimensionales de Arabia Terra.

Finalmente, los estudiosos calcularon la cantidad de material que habría explotado de cada volcán en función al volumen de cada caldera. Los resultados les permitieron estimar el número aproximado de explosiones que hubiesen sido necesarias para producir el espesor de ceniza que encontraron.