Ciencia

Descubren que el coronavirus no muta drásticamente, lo que lo vuelve menos peligroso en el tiempo

Expertos de España y Estados Unidos notaron que el virus del SARS-CoV-2 no muta tan rápido como se pensaba, por lo que una sola vacuna podría enfrentarla, a diferencia de la gripe.

En Estados Unidos comenzaron la primera fase de los ensayos clínicos de su propia vacuna experimental contra el coronavirus. Foto: EFE
En Estados Unidos comenzaron la primera fase de los ensayos clínicos de su propia vacuna experimental contra el coronavirus. Foto: EFE

Estudios realizados en España y Estados Unidos sobre el virus SARS-CoV-2, causante de la pandemia del COVID-19, demostraron que el también llamado coronavirus no está mutando significativamente, lo que sugiere que es menos probable que con el tiempo se vuelva más peligroso.

Esta conclusión representaría una buena noticia para los científicos que están en busca de la cura de esta enfermedad, que hasta el momento ha infectado a más de 500 000 personas, de los cuales 23 067 han perdido la vida, según el contador de la Univerdidad de Johns Hopkins.

Según explicó a The Washington Post Peter Thielen, genetista del Laboratorio de Física Aplicada de la Univerdidad de Johns Hopkins, los científicos están trabajando con más de 1000 muestras diferentes del coronavirus.

El experto agregó que hasta el momento se han identificado 10 diferencias genéticas entre la cepa de las personas infectadas en Estados Unidos y los resultados de los habitantes contagiados en la ciudad de Wuhan, en China.

“Esa es una cantidad relativamente pequeña de mutaciones por haber pasado a través de una gran cantidad de personas”, dijo Thielen al medio estadounidense.

Bajo los conceptos establecidos, los profesionales estimaron que sería una sola vacuna la que pueda combatir el coronavirus, a diferencia de una que se fabrique cada año, como se hace en el caso de la gripe común.

Este sería un modelo similar a la medicina creada contra la sarampión o la varicela, lo que significa que una sola dosis otorgaría amplia inmunidad.

De acuerdo con una información recogida por la agencia Sinc, el análisis de la primera secuencia del genoma del coronavirus tomada a un paciente de España determinó que el COVID-19 no está “ganando agresividad”. Además, tampoco cambia sus patrones de transmisión.

“Hemos identificado las mutaciones, y como ha pasado bastante tiempo desde el principio de la epidemia, vemos que son bastantes, pero no más que en otros países”, informa a SINC Fernando González Candelas, investigador de la Universidad de Valencia.