Andrea Cisternino es un hombre italiano y exfotógrafo que migró a Ucrania hace 10 años en compañía de su esposa Vlada Shalutko. La razón de ello fue para combatir y detener las matanzas de perros callejeros, esta acción lo motivó a abrir su propio refugio justo a 45 km de Kiev, y desde 2013, se ha dedicado a acoger a decenas de animales abandonados a su suerte. Ahora, su historia se hizo viral por TikTok y miles de internautas lo han felicitado por su labor.
Cisternino ha vivido una dura batalla por mantener su refugio, puesto que dos años después sufrió un incendio, y según sus propias palabras, “nadie, ni siquiera los bomberos” fueron a socorrerlos. En este fatídico evento murieron 71 perros.
A pesar de las dificultades y de un incendio que se llevó a varios de sus animales, el italiano volvió con más fuerza y abrió un nuevo refugio denominado “Italia Kj2″.
Este tiene una extensión de aprox. 20.000 metros cuadrados de terreno divididos en diferentes áreas para cada grupo de animales, también cuenta con almacenes, establos, cocinas, e inclusive, una clínica veterinaria. Actualmente, tiene alrededor de 400 animales.
Sobre su estado actual, el activista se reporta de manera periódica en sus publicaciones de Facebook. Él afirmó que no piensa dejar a sus animales solos y expresó el sacrifico que está dispuesto a dar: “Prefiero morir con ellos”.
Su última actualización fue el día de ayer, 25 de febrero, donde reveló lo siguiente: “aunque disparen estamos bien”.
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El mensaje más ejemplar que verás hoy. En TikTok se volvió viral un video protagonizado por dos niños. Estos encantadores menores de edad dejaron un magnífico mensaje de paz sobre el conflicto armado en que se encuentran los países de Rusia y Ucrania. Los pequeños pidieron que cesen los ataques contra este último país.
En este contenido multimedia, compartido por el usuario de TikTok @saveukraine, se puede ver inicialmente a los dos niños mirándose de forma desafiante. Cada uno lleva una bandera de los países en guerra, Ucrania y Rusia. En seguida, los pequeños dejan de observarse molestos y se dan un abrazo.