Hace ya varios meses, Apple anunció ante sorpresa del mundo entero que sus nuevos teléfonos inteligentes de alta gama, los iPhone 12, no iban a incluir cargador en sus cajas de fábrica. Todo para resguardar el medio ambiente. Sin embargo, la decisión no fue bien recibida por organismos de varios países y ahora Brasil se ha sumado a la lista.
Según Apple, la ausencia de un adaptador de corriente tiene como único fin no generar desperdicio electrónico. Pese a ello, a lo largo de los últimos meses, se ha demostrado que la diferencia en el impacto es mínimo. Muchos especialistas precisaron que la compañía pudo haber tenido una razón mayor: ahorrar costos por la llegada del 5G.
Lo cierto es que, ahora, la agencia de protección al consumidor de Sao Paulo (de nombre Procon-SP) ha decidido multar a la empresa tecnológica por una suma de 10,5 millones de reales (alrededor de 1,9 millones de dólares). La medida se tomó después de que no aceptasen las justificaciones de Apple para no proveer un cargador.
Cupertino señaló que quitar el cargador de la presentación reduce la basura electrónica y las emisiones causadas por los pequeños adaptadores blancos, los cuales tendrían efectos acumulativos similares a los que producen dos millones de toneladas de carbón una vez que entren a la atmósfera.
Pese a esto, los analistas brasileros concluyeron que los beneficios reales eran menos significativos que aquellos. Peor aún, el cambio beneficia mucho más a los ingresos de Apple.
Todo inició con una investigación iniciada por Procon-SP en noviembre. Según reportan, en un momento, la empresa dejó de responder las solicitudes de información. El organismo no pudo tener respuestas claras y se vio forzada a emitir un veredicto.
“Apple necesita entender que, en Brasil, hay leyes e instituciones sólidas para la protección de los consumidores. Ellos necesitan respetar estas leyes e instituciones”, afirmó Fernando Capez, director ejecutivo de Procon-SP.