Marco Arenas, autor de la muerte de la empresaria María Rosa Castillo, mantenía en redes sociales contacto con grupo de sicarios. Su novia, Fernanda Lora, lo delató. Policía no descarta que haya cometido otros homicidios.Amplían indagación.,Ernesto Guerrero Lauri Peritos de la Dirincri descubrieron en la computadora personal de Marco Gabriel Arenas –el insensible muchacho que quemó viva a su madre María Rosa Castillo en un terral de Manchay– información que lo implicaría en la posible ejecución de 'crímenes por encargo'. Fuentes policiales revelaron que el parricida mantenía a través de las redes sociales vínculos con miembros de un grupo clandestino conocido como 'The killers' (los asesinos). Los agentes pudieron comprobar esta relación luego de revisar la laptop del joven de 22 años. Su novia, Fernanda Lora Paz (18), coautora del homicidio de la empresaria panificadora, fue quien dio algunas pistas al respecto. MUY PELIGROSO En efecto, la estudiante de psicología de la Universidad San Ignacio de Loyola orientó a los agentes en ese sentido cuando la interrogaron sobre la muerte de María Rosa Castillo la noche del domingo pasado. Marco Gabriel "...es muy peligroso. Lo he visto consumir drogas y me ha contado que tiene contacto con sicarios", narró la muchacha ese día en presencia del fiscal Juan Pablo Mamani. ARCHIVOS DE SANGRE Las fuentes consultadas por La República revelaron que en la computadora portátil del parricida también se descubrió archivos de 10 homicidios emblemáticos cometidos en Lima en los últimos tres años. Había, entre otros casos, información detallada del asesinato perpetrado el 30 de mayo del 2010 por el holandés Joran Van der Sloot contra la estudiante peruana Stephany Tatiana Flores Ramírez, hija del empresario y piloto de autos de carrera Richard Flores. Igualmente sobre la horrenda muerte de Ruth Thalía Sayas Sánchez, la joven de 19 años que fue asesinada por su enamorado Bryan Romero Leiva, para robarle el dinero que había ganado en un programa de televisión. DESTACA ERRORES Lo peculiar es que Marco Gabriel resalta los errores cometidos por Van der Sloot y Bryan Leiva en ambos crímenes y anota que por no ser cuidadosos acabaron presos. En el caso del holandés, critica el descuido que tuvo al dejarse grabar por las cámaras de seguridad del hotel donde mató a Sthefany Tatiana, así como el modo torpe en que huyó a Chile, de donde después fue extraditado. En relación con el homicidio perpetrado por Bryan Romero, considera que no supo afrontar el interrogatorio de la policía y por ello terminó confesando un crimen que pudo haber quedado impune. Por estas razones los detectives abrieron una nueva línea de investigación, a fin de establecer si el parricida tuvo algún tipo de participación en otros asesinatos. MÁS EVIDENCIAS Uno de los detectives responsables de las pesquisas explicó que esta hipótesis no solo se sustenta en la información descubierta en la computadora y en la versión que dio la novia Fernanda Lora. También se tuvo en cuenta los seis pares de guantes quirúrgicos, así como las cuerdas especiales y bolsas de gran tamaño que fueron hallados en el dormitorio de Marco Gabriel por personal de Criminalística. Estos implementos suelen ser utilizados por sicarios para inmovilizar, matar y luego trasladar los cadáveres sin dejar huellas. TÍPICO PSICÓPATA El experto en criminología forense Luis Alberto Toribio Paulino explicó que los psicópatas son insensibles, calculadores, detallistas, crueles, desconfiados y muy inteligentes, características que, a su juicio, encajan perfectamente con las del joven parricida. Este tipo de personas, según el especialista, proceden de hogares disfuncionales. "Si se tomó el trabajo de analizar crímenes en su laptop, es muy probable que lo haya hecho para no cometer los mismos errores", subrayó. Toribio Paulino, quien es profesor en la Escuela de la Magistratura, indicó que el estallido mediático de un psicópata no necesariamente se da cuando se consuma su primer crimen. "Existen elementos para pensar que puede haber otras víctimas", puntualizó. DOLOR DE PADRE Walter Arenas, padre del parricida, fue ayer al penal Piedras Gordas de Ancón, llevando víveres al parricida. "Está abrumado, sabe que el muchacho hizo mal, pero, entiéndanlo, es su único hijo", señaló un amigo de la familia. EL CRIMEN María Rosa Castillo Gonzales fue quemada viva la tarde del 5 de noviembre pasado en un terral ubicado a la altura del km. 10.5 de la carretera a Manchay. El cadáver recién fue identificado el sábado último. Veinticuatro horas después el parricida y su novia fueron detenidos. El miércoles se les abrió proceso penal.